La frecuencia de mantenimiento del horno debe ser equivalente a la frecuencia de uso durante la semana. Descubra en este artículo por qué el vinagre y el bicarbonato de sodio son grandes aliados de su horno.
Usar bicarbonato sódico y vinagre en el horno: ¡te sorprenderá lo que ocurre!
Una de las tareas domésticas más agotadoras es la limpieza del horno, que requiere mucho esfuerzo. Esto se debe a las incrustaciones que pueden apoderarse rápidamente de él. Las salpicaduras de aceite e ingredientes se carbonizan con el calor y se adhieren a las paredes, dificultando su eliminación.
Sin embargo, estos depósitos no están exentos de consecuencias, ya que no sólo provocan mal olor, sino también riesgos para la salud. Por eso es conveniente realizar una desinfección a fondo para evitar sorpresas desagradables.
En lugar de utilizar productos químicos agresivos y nocivos para la salud, es mejor recurrir a remedios naturales que son el doble de eficaces. Entre ellos, el bicarbonato y el vinagre.
¿Cómo hacerlo?
Ya no es novedad que el vinagre y el bicarbonato de sodio son ingredientes naturales con altas propiedades desengrasantes y desinfectantes. Puedes utilizarlos para limpiar a fondo el interior de tu horno.
A continuación te explicamos cómo hacerlo:
- Espolvorea una cantidad generosa de bicarbonato de sodio en el fondo del horno;
- Calentar el vinagre de vino blanco hasta que esté tibio;
- Verterlo en un recipiente con agua y colocarlo dentro del horno y encima del bicarbonato de sodio;
- Dejar reposar durante 30 minutos;
Una vez transcurrido el tiempo, limpiar el horno con vinagre caliente;
Aclarar con agua y secar con un paño limpio.