¿Por qué no envolver las sobras de comida en papel de aluminio?

Guardar las sobras de comida en papel de aluminio no es un hábito nada saludable. Descubre por qué no debes hacerlo nunca más.

A la hora de guardar las sobras de comida, hay que elegir los elementos adecuados para que se mantengan frescas hasta el momento de comerlas.

La gente suele optar por el papel de aluminio para envolver los restos de comida. Pero no siempre es la mejor opción para mantenerse sano.

¿Por qué evitar el papel de aluminio para envolver los restos de comida?

En primer lugar, debe saber que utilizar papel de aluminio para envolver los restos de comida permite que entre oxígeno en el papel. Esto favorece la proliferación de bacterias nocivas que pueden contaminar los alimentos.

Esta exposición puede hacer que los alimentos se estropeen más rápidamente y se estropeen antes de tiempo. Si quiere conservar las sobras correctamente, debe elegir alternativas más sanas que protejan los alimentos de las bacterias.

¿Cuáles son las alternativas más sanas al papel de aluminio?

En lugar de utilizar papel de aluminio para envolver los alimentos, puede utilizar film transparente. Se trata de un material que sella los alimentos para evitar la entrada de bacterias nocivas.

Es muy fácil de usar y ofrece una excelente protección para todo tipo de alimentos. Sin embargo, debes asegurarte de elegir film transparente de buena calidad y obtendrás los mejores resultados.

Otra opción más sana son los recipientes herméticamente cerrados. Se trata de recipientes fabricados para almacenar alimentos herméticamente.

Garantizan un almacenamiento higiénico al mantener alejadas las bacterias. Disponibles en multitud de tamaños y formas, los botes herméticos son la mejor opción si quieres conservar tus alimentos durante mucho tiempo.

Si no quiere utilizar papel de aluminio, la solución más ecológica son los envases de cera de abeja. Se trata de láminas de tela recubiertas de una mezcla de cera de abeja, aceite de jojoba y resina de árbol.

Al calentarlas con las manos, se ablandan y se adhieren al alimento formando una especie de barrera protectora. Al elegir este tipo de envase, estás haciendo una elección más ecológica y sostenible. Además, puedes utilizarlo varias veces antes de tirarlo.