El árbol de jade es una planta suculenta originaria de Sudáfrica. Se distingue por sus hojas carnosas y sus gruesos tallos.
Fácil de cultivar, el árbol de jade es una planta de interior popular que es sinónimo de buena suerte.
En este artículo, le mostraremos cómo podar esta planta para garantizar un crecimiento rápido y sano.
Podar un árbol de jade
¿Tienes un árbol de jade y quieres que crezca adecuadamente? Sólo tienes que podarlo siguiendo estos pocos pasos, y tendrás una planta atractiva y floreciente durante muchos años.
Preparación
En primer lugar, debes preparar las herramientas de poda, como tijeras de podar y tijeras de podar, que deben estar desinfectadas y afiladas. Esto es importante para no dañar la planta y limitar el riesgo de infección. No olvide llevar guantes para protegerse las manos.
Localización de las zonas que hay que podar
Identifique los tallos demasiado largos, demasiado delgados o que crecen sin control. Lo mismo ocurre con las hojas secas, amarillentas o enfermas.
Poda de los tallos
Corte los tallos a 1/3 de su longitud justo por encima de un nudo o un par de hojas. Haga un corte limpio y en ángulo para simplificar la cicatrización. Espere unos días antes de regar.
Quitar las hojas
Retire con cuidado las hojas muertas, amarillentas o enfermas de la base del tallo utilizando las manos o unas tijeras.
Tenga cuidado de no dañar las hojas sanas.
Cultivo de un árbol de jade
Tras la poda, debes cuidar tu árbol de jade para que crezca y prospere en condiciones óptimas.
Elige un lugar adecuado
Para garantizar su crecimiento, coloca la planta en un lugar luminoso con unas 6 horas de luz indirecta al día. Una luz insuficiente puede ralentizar el crecimiento de tu árbol de jade.
Evite colocarlo cerca de corrientes de aire frío, ya que a esta planta no le gustan las variaciones de temperatura.
Elija el sustrato adecuado
Para cultivar tu árbol de jade, elige una mezcla de tierra para macetas y arena gruesa o perlita. Este tipo de sustrato garantiza un buen drenaje al tiempo que protege las raíces de la podredumbre.
Riega bien
Riegue cuando el sustrato esté seco hasta una profundidad de 3 cm. Riegue con menos frecuencia durante el invierno, cuando la planta está inactiva.
