La rosa es sin duda una de las flores que más gustan a todo el mundo. Se distingue por su infinita paleta de colores, que ofrece matices excepcionales.
La rosa es una planta que florece en mayo. Sin embargo, algunas especies siguen floreciendo en otoño e incluso en invierno.
Pero sea cual sea la variedad que cultives, vamos a compartir contigo algunos valiosos consejos para que tus rosales florezcan durante mucho tiempo. Así, podrás disfrutar de tus hermosas rosas durante varias semanas.
Riega con regularidad
Si quieres preservar la salud de tus rosales y seguir teniendo flores duraderas, debes vigilar la hidratación de tus plantas.
Debe regarlas con regularidad y aumentar la frecuencia de riego a medida que cambie la temperatura. Debe mantener siempre la tierra húmeda, con agua no demasiado dura.
Por lo general, cuando las temperaturas alcanzan los 24 grados, hay que regar cada 2 ó 3 días. Pero antes de regar, hay que asegurarse de que la tierra esté seca para evitar que el agua se estanque.
De este modo, conseguirás que tus rosales conserven sus flores durante más tiempo.
Elimina las flores secas
Si observas que las flores secas de tu rosal no se caen, debes retirarlas inmediatamente. Para ello, utiliza unas tijeras limpias y desinfectadas.
También puedes arrancarlas a mano, con cuidado de no dañar toda la planta.
Este paso es importante para asegurar la aparición de nuevos brotes y evitar que las flores secas se pudran y propaguen enfermedades.
Opte por abonos a base de fósforo
Si quieres que tus rosales conserven sus flores durante mucho tiempo, todo es cuestión de abonar. Abonar las plantas les aporta nutrientes esenciales que favorecen su floración. Por eso los expertos recomiendan abonar los rosales en cuanto aparece la primavera.
Existen varios tipos de abono para rosales en el mercado. Muchos optan por utilizar la fórmula NPK 7:5:6, que se traduce como 7 partes de nitrógeno por 5 de fósforo y 6 de potasio.
Sin embargo, algunos jardineros confirman que si quieres flores que duren varias semanas, debes dar prioridad al fósforo sobre otros elementos. Por ejemplo, siga la formulación NPK 18:24:16.
