Si quieres tener unas cortinas limpias y frescas sin necesidad de quitarlas, puedes utilizar este sencillo remedio casero.
Gracias a este increíble truco, ¡tendrás unas cortinas limpias y frescas sin necesidad de quitarlas de las ventanas!
Las cortinas se consideran accesorios decorativos por derecho propio. Existen en una gran variedad de diseños y estampados que se adaptan a las preferencias de cada uno. Muchas personas, por ejemplo, eligen cortinas de lino, mientras que otras optan por tejidos clásicos.
En cuanto al color, nos inclinamos por tonos que combinen con los muebles y las paredes, pero hay para todos los gustos.
Sin embargo, debes saber que las cortinas son accesorios que necesitan un mantenimiento adecuado. ¿Qué significa esto? Si quieres que tus cortinas duren años, debes cuidarlas lavándolas con regularidad. Cuando cambie la estación, límpielas para que luzcan frescas y limpias.
Para ello, debe lavar las cortinas de la cocina más a menudo, ya que pueden impregnarse de los olores de diversos alimentos. Dependiendo del material de tus cortinas, deberás lavarlas siguiendo las instrucciones de la etiqueta. Los tejidos delicados, como la seda o el lino, requieren una temperatura de limpieza adecuada para evitar que se estropeen.
Sin embargo, muchas personas se preguntan cómo evitar dañar sus cortinas con un lavado fuerte. ¿Hay alguna solución práctica para mantener frescas las cortinas, sobre todo las de la cocina?
Bicarbonato, suavizante y agua: estos son los ingredientes que necesitas para unas cortinas con olor fresco.
Si quieres unas cortinas limpias y frescas sin tener que quitarlas de las ventanas ni estropearlas, todo lo que necesitas son estos tres ingredientes comunes. En concreto, necesitas agua, bicarbonato sódico y suavizante. Toma media cucharada de bicarbonato de sodio y disuélvela en agua. A continuación, añade un poco de suavizante.
Mezcla bien y vierte la solución resultante en una botella con pulverizador. A continuación, pulveriza este remedio natural de bricolaje sobre las cortinas de la cocina y otras habitaciones de la casa para eliminar los malos olores.
También es perfecto para dar un toque de frescor y limpieza a las sábanas y sofás de la casa. Es un remedio esencial para mantener tu casa fresca y tus cortinas limpias sin necesidad de quitarlas de las ventanas.
