¿Por qué todo el mundo debe dejar la puerta de la lavadora abierta después del ciclo de lavado?

Hoy en día, la mayoría de los hogares disponen de lavadora. Sin embargo, no todo el mundo sabe utilizarla correctamente. Al utilizar este electrodoméstico a diario, la gente comete el error de cerrar el ojo de buey después de recoger la ropa mojada.

Por desgracia, este gesto inofensivo puede tener un efecto crucial en el buen funcionamiento de su electrodoméstico. Para garantizar que su lavadora siga funcionando bien en el futuro, nos gustaría explicarle por qué debe dejarla abierta después de cada ciclo de lavado.

Si tiene la costumbre de cerrar la lavadora inmediatamente después del lavado, debe cambiar su rutina de inmediato para evitar posibles daños. Mantener la puerta de su lavadora cerrada puede causar una serie de problemas con la propia máquina y con la higiene.

Formación de olores desagradables

¿Alguna vez ha notado que la ropa recién lavada desprende olores desagradables? Este problema está causado por un fenómeno sencillo: el moho.

De hecho, los aparatos de carga frontal suelen ser propensos a este tipo de problema, y no es realmente sorprendente. Y por una buena razón: cuando cierras la puerta después de lavar, mantienes la humedad dentro de la máquina.

Es este ambiente húmedo y oscuro el que se presenta como un caldo de cultivo para el moho.

Crecimiento bacteriano

Cuando se utiliza la lavadora de forma incorrecta, la aparición de olores desagradables no es el único problema que puede surgir. De hecho, si deja la puerta cerrada después de cada ciclo de lavado, las bacterias proliferarán a gran velocidad en su electrodoméstico, así como en otras zonas como el compartimento del detergente y las tuberías.

Como resultado, aunque el propósito de este electrodoméstico es limpiar y desinfectar la ropa, también puede ensuciarla. Y ésta es una situación que parece dramática para las personas con alergias y enfermedades respiratorias.

Daños en la lavadora

Si cierras la lavadora inmediatamente después de lavar, los restos de moho y detergente se acumulan en la junta del aparato.

Esto puede causar muchos daños con el tiempo. Y ya no podrá utilizar el aparato a menos que cambie la junta inmediatamente.

Sin embargo, puede evitar que esto ocurra si se acostumbra a abrir la puerta después del ciclo de lavado. De esta forma, podrás dejar salir la humedad.