Además de sus usos tradicionales, estos 2 productos pueden utilizarse para otras tareas domésticas. En la práctica, la sal gorda y el papel de aluminio pueden utilizarse para resolver una serie de problemas domésticos comunes. Los cubiertos sucios, por ejemplo, son un problema doméstico habitual.
¿Por qué la sal gorda y el papel de aluminio no deben faltar nunca en tu casa?
Todos tenemos cubiertos en casa, ya sean joyas o bandejas. Con el tiempo, estos objetos se vuelven negros y opacos. Esto se debe a la oxidación natural de la plata. Como puedes ver, los cubiertos de plata nunca son inmunes al ennegrecimiento, lo que afecta su estética.
En lugar de utilizar productos químicos dañinos para el medio ambiente e ineficaces, es mejor recurrir a productos naturales que no cuestan casi nada. Es el caso de la sal gorda y el papel de aluminio. Estos dos productos se complementan con bicarbonato sódico y agua caliente.
He aquí los pasos a seguir:
1- Cubre el fondo de un recipiente con una hoja de papel de aluminio;
2- Vierte un poco de agua caliente y añade 2 cucharadas de sal gorda y 1 cucharada de bicarbonato sódico;
3- Mezclar bien y sumergir los cubiertos en el interior;
4- Cubrir con agua caliente y sellar con papel de aluminio;
5- Meter en el horno durante 40 minutos;
6- Una vez transcurrido el tiempo, encontrará sus joyas y cubiertos limpios y brillantes;
7- Aclarar bien y secar con un paño.