El polvo en el radiador es inevitable, sobre todo después de un largo periodo sin uso. Ha llegado el momento de preparar el radiador para la temporada de invierno. Antes de empezar a utilizar tu radiador, tendrás que realizar un mantenimiento en profundidad para eliminar el polvo y la suciedad. Aquí tienes el secreto para hacerlo de forma rápida y sin complicaciones.
Polvo en el radiador: utiliza una aspiradora
Para eliminar fácilmente el polvo del radiador, aprovecha la potencia de succión de la aspiradora. Esta solución atrapa la mayor cantidad de polvo posible gracias a una boquilla especial que puede llegar a las zonas más inaccesibles. Basta con pasar varias veces la aspiradora por las rendijas.
¿Cómo se quita el polvo del radiador con un secador de pelo?
A diferencia de pasar la aspiradora, el secador de pelo dispersa el polvo acumulado. Sin embargo, debes prepararte previamente para evitar que el polvo se pegue a las paredes y al suelo. Para ello, sigue correctamente estos pasos
- Coloque un paño húmedo detrás y debajo del radiador;
- Poner en marcha el secador y transferir el chorro de aire frío primero a los orificios superiores;
- A continuación, pasa a las paredes y listo.
- El truco del nudo para eliminar el polvo del radiador
- Para utilizar el método del nudo, necesitarás un paño para el polvo. Forma un nudo en un extremo e introdúcelo en las ranuras del radiador.
Al limpiar, mantén siempre el nudo en el exterior. Deslízalo hacia fuera sujetándolo por la cola y tira hacia abajo. Para una mayor eficacia, también puedes humedecer el paño en una mezcla de 500 ml de agua y un vaso de vinagre.
¿Cómo se utiliza el plumero?
Este plumero también se puede utilizar para atraer la mayor cantidad de polvo posible hacia el radiador, procediendo de la siguiente manera :
- Deslícelo por los orificios situados encima del radiador;
- Pase el plumero varias veces para asegurarse de eliminar todo el polvo y los residuos.
