Limpiar la casa no es tarea fácil. El polvo puede invadir rápidamente tu hogar, y la mayoría de los productos contienen sustancias tóxicas que pueden envenenar tu salud. Pero por suerte puedes utilizar este brillante método para revolucionar esta tediosa tarea.
Despídete de los productos químicos y déjate tentar por este ingrediente natural que seguro que tienes en tu cocina. Es una solución formidable por la que juran los profesionales de la limpieza.
¿No te apetece utilizar productos domésticos llenos de sustancias químicas y que contaminan el medio ambiente? Hemos ideado una solución que combina practicidad y eficacia para mantener su suelo reluciente.
Con este método, su escoba es todo lo que necesita para abrillantar el suelo sin necesidad de fregona.
Truco para un suelo brillante: ¿funciona realmente el limón?
Poca gente sabe que el limón es un valioso aliado en el mantenimiento del hogar. Es un ingrediente limpiador natural que puede utilizarse para eliminar la suciedad incrustada gracias a su alto contenido en ácido cítrico.
El limón es muy versátil y puede ayudarte de muchas maneras. Por ejemplo, puede utilizarse para limpiar cualquier superficie del hogar. Gracias a sus propiedades antibacterianas, este cítrico amarillo sirve para desinfectar diversos objetos.
Así que en lugar de recurrir a productos químicos, utiliza el limón para higienizar tu cocina, electrodomésticos, sanitarios y suelos.
¿Por qué echar zumo de limón en la escoba?
El limón no sólo es apreciado por su aroma ultra fresco. También es un producto doméstico natural muy útil para la limpieza. ¿Cómo lo utilizan las amas de casa a diario para facilitar la limpieza?
Este ingenioso método es esencial para acabar con los malos olores y eliminar toda la suciedad de la casa. Para ello, empapa la escoba en zumo de limón y déjala secar un rato antes de utilizarla.
El limón desinfecta las cerdas de la escoba y la limpia. Si utiliza una escoba limpia y desinfectada durante la limpieza, la suciedad y el polvo se eliminan más fácilmente.
Además, utilizar una escoba sucia y llena de bacterias sólo consigue ensuciar más el suelo.