En verano, la invasión de avispas y avispones no necesita presentación. Estas criaturas prosperan cuando sube el mercurio.
Pero si quieres un verano sin zumbidos, todo lo que necesitas es esta maravillosa planta en tu casa. No te preocupes, a las avispas y avispones no les gusta.
Cuando llega el verano, empieza la invasión de avispas y avispones. En muy poco tiempo, estas pequeñas criaturas pueden invadir los espacios exteriores, arruinando por completo los almuerzos al sol o incluso las tardes de barbacoa.
Afortunadamente, puede utilizar esta solución natural para repelerlas para siempre. Esta planta puede ser todo lo que necesitas para decir adiós a estos himenópteros.
Avispas y avispones: ¿por qué son tan invasores?
El verano es la época de invasión de avispas y avispones. Y la razón es sencilla: les atraen las altas temperaturas y los cubos de basura llenos de restos de comida y fruta podrida. Como resultado, se dirigen a los hogares.
Además de su presencia especialmente molesta, estos insectos pueden provocar picaduras dolorosas e incluso peligrosas, sobre todo para los alérgicos.
Sin embargo, antes de eliminarlos definitivamente, debe saber que estos bichos desempeñan una función ecológica al controlar a otros insectos. Así que en lugar de utilizar productos químicos para mantenerlos a raya, considere la posibilidad de optar por soluciones más naturales.
¿Qué planta debo cultivar en casa para decir adiós a avispas y avispones?
Para acabar con la vergonzosa invasión de avispas, basta con plantar en casa una planta que tenga efecto repelente. Hablamos de la menta.
Muy utilizada en la cocina, el intenso aroma de esta planta aromática repele a avispas y avispones. Si colocas macetas de menta en los lugares más frecuentados por estos insectos, huirán de inmediato y tu espacio exterior quedará completamente libre de ellos.
¿Qué otros aromas no gustan a las avispas y avispones?
Si no puedes plantar menta en tu casa, puedes utilizar ciertos olores que estos insectos no soportan. Por ejemplo, prueba a utilizar clavo, cítricos o hierba limón.
Para ello, haz composiciones aromáticas pinchando clavos en la piel de naranjas. Después, colócalas alrededor de tu balcón o jardín.
También puedes verter unas gotas de aceite esencial de citronela en trozos de tela para repeler a estos insectos indeseados.