Quienes tienen un fregadero de acero siempre tienen problemas para limpiarlo y pulirlo para que parezca un espejo. Para eliminar la suciedad, las manchas y los anillos, aquí tienes 4 consejos increíbles que te dejarán sin palabras.
Tienes un fregadero de cocina de acero y has probado todos los productos de limpieza caros que salen en la tele diciendo que tienen resultados impecables, pero no merece la pena. En lugar de utilizar esos productos domésticos tan duros del supermercado, prueba los viejos remedios de la abuela, que combinan eficacia y economía. Utilizan una cuchara como unidad de medida y combinan varios ingredientes naturales que seguro que tienes en casa.
Di adiós a los caros productos industriales y deja paso a estos trucos naturales que te ahorrarán tiempo y dinero. Descubre cómo ahora mismo.
Mantén limpio tu fregadero: un truco barato para convertirlo en un espejo
Si aún no lo has hecho, hazte con una cuchara de cocina y ponte manos a la obra de inmediato.
El primer remedio es utilizar una cucharada de aceite de oliva vertida en un algodón o paño suave. A continuación, utilícelo para fregar suavemente el fregadero. El aceite de oliva es un producto alimenticio conocido por sus increíbles propiedades organolépticas. También puede utilizarse sobre la piel, superficies de acero e incluso madera. Por último, pasa un paño suave empapado en vinagre blanco para eliminar todos los restos de aceite y sécalo con un paño seco.
El segundo consejo es utilizar una mezcla de vinagre y limón. Para ello, mezcla una cucharada de cada ingrediente y vierte la mezcla resultante en un paño limpio. Utiliza el paño para fregar el fregadero y déjalo actuar unos 2 minutos. A continuación, aclara con agua templada y seca con un paño limpio o papel de cocina.
El alcohol etílico desnaturalizado también es adecuado para limpiar el fregadero. Vierte una cucharada de alcohol directamente sobre el fregadero y frota suavemente con un paño suave de microfibra. Sécalo con unas toallitas de papel.
Por último, utiliza harina blanca para abrillantar el fregadero. Así es, la harina es un producto excelente para abrillantar el fregadero de forma rápida y sencilla. No todo el mundo conoce las propiedades absorbentes y abrasivas de este ingrediente, que suele encontrarse en la despensa. Basta con espolvorear una cucharadita de harina sobre el fregadero y pasarla por la superficie con una esponja. Aclárala bien con agua.
