¿Es posible cambiar el color de su hortensia?

El color de las hortensias suele oscilar entre el rosa y el violeta. Pero a menudo oímos que existen otras tonalidades más intensas con el paso de las estaciones.

Si desea cambiar el color de sus hortensias, sólo podrá hacerlo manipulando la composición química del suelo. En otras palabras, hay que aprovechar la naturaleza acidófila de la planta y tratar el pH.

Descubra cómo cambiar el color de su hortensia de rosa a un azul intenso.

¿Qué es el pH?

El pH se define como la naturaleza química del suelo. Es de gran importancia para las plantas para asegurar la absorción de nutrientes.

Se dice que un valor de pH entre 0 y 5 es ácido. Si se sitúa en torno a 6 ó 7, el pH del suelo es neutro. Por encima de 8 y hasta 14, el pH es básico o alcalino.

El pH puede ajustarse en función del tipo de plantas que cultive, que requieren un tipo de pH particular.

¿Qué tipo de suelo necesitan las hortensias?

Las hortensias pueden crecer y prosperar en suelos ácidos. Sin embargo, esta planta puede cambiar el color de sus flores en función de la calidad del suelo.

Hay que subrayar, sin embargo, que esta variación de tono se produce dentro de la misma gama de colores. No se trata de una transición del blanco al azul, sino del violeta a un azul más intenso.

¿Cómo manipular el pH para cambiar el color de sus hortensias?

Es fácil modificar el pH de su suelo.

Si quiere flores de hortensia de color azul intenso, debe mantener la acidez de la tierra o hacerla más ácida.

Para ello, utilice agua destilada o ablandada. Evite el agua del grifo, que suele ser dura, ya que puede elevar el nivel de pH.

También se aconseja utilizar posos de café, esparcidos directamente sobre la tierra o mezclados con ella. Los posos de café aportarán al suelo una generosa cantidad de nitrógeno, que puede reducir el pH.

También puedes cubrir el suelo con corteza de pino o abeto. Son dos plantas de composición ácida, por lo que ayudan a bajar el pH del suelo haciéndolo más ácido.

Utiliza también abonos que contengan óxidos de hierro o abonos adecuados para plantas ácidas. Pueden mantener la acidez del suelo o hacerla más ácida.