Un sistema alternativo para la limpieza de la placa, y especialmente de los quemadores, requiere de un objeto que normalmente nunca se nos ocurriría utilizar para este fin: la pastilla del lavavajillas.
En la cocina, a la hora de afrontar la limpieza, muchas veces tenemos que buscar alternativas a los métodos clásicos para obtener mejores resultados y que consigan mantener nuestras expectativas altas.
La encimera en concreto es una de las zonas que puede resultar más complicada de limpiar ya que las salpicaduras, residuos e incrustaciones de los alimentos cocinados suelen resultar muy difíciles de eliminar.
Entre los elementos que forman parte de la encimera, hay que prestar especial atención a los quemadores que, de lo contrario, con el tiempo pueden volverse completamente negros y seguramente no será fácil devolverlos a su antiguo esplendor.
Precisamente por eso hemos decidido revelarte un truco realmente eficaz para conseguir una limpieza perfecta de los quemadores, utilizando productos que jamás habrías imaginado.
De hecho, para implementar este método necesitaremos pastillas para lavavajillas, detergente líquido para platos, bicarbonato de sodio y jabón de Marsella sólido reducido a escamas.
Lo primero que tendrás que hacer será retirar todos los quemadores de la encimera y colocarlos dentro de un recipiente suficientemente grande.
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Una vez insertados, vierte sobre ellos todos los ingredientes, empezando por la pastilla para lavavajillas y siguiendo por el detergente para lavavajillas, el jabón de Marsella y el bicarbonato de sodio.
En este punto solo queda cubrir todo con agua muy caliente y dejar en remojo nada menos que 30 minutos. Una vez transcurrido el tiempo necesario, con ayuda de una esponja de acero, frotar bien cada pieza individual para eliminar posibles residuos, enjuagar con abundante agua y secar bien.
De esta forma nuestros quemadores estarán siempre brillantes y perfectos. Puede hacer esto todas las semanas para evitar la acumulación de sarro.