El romero es una planta aromática muy extendida. Adaptada a todo tipo de entornos, esta planta perenne puede cultivarse en el jardín o en casa. Para cultivar una nueva planta de romero, basta con tomar un esqueje. Esta técnica es muy fácil de reproducir, ya que las ramas enraízan fácilmente. Si tiene una planta vieja de esta forma, puede crear otras nuevas y colocarlas en otros rincones de su jardín.
El esqueje es una técnica de propagación muy utilizada. Es muy sencilla, pero también muy rápida, ya que se tarda alrededor de un año en reproducir una planta por esqueje. En cambio, con semillas se tardaría tres años. ¿Cómo se hacen los esquejes y cómo se cuidan las plantas jóvenes?
¿Cómo se reproduce el romero por esquejes?
La mejor época para hacer esquejes es la primavera. Con un clima suave, los esquejes son perfectos desde mediados de primavera hasta principios de otoño. Evite hacer esquejes durante los meses más calurosos.
En primer lugar, elija la mejor rama de la planta madre. Después, identifique la parte inicial de la rama. Si toma la última parte, haga un corte en punta. En cambio, si coges una rama joven y pequeña, haz lo que se conoce como corte en talón. Corta la rama a una longitud máxima de 10 a 15 centímetros. A continuación, limpie la parte inferior, es decir, retire todas las acículas en una longitud de 6 a 8 cm. A continuación, haga una punta en la parte que vaya a enterrar. Para ello, corte la rama en un ángulo de 45° aproximadamente.
Ahora prepare la maceta en la que va a plantar su nueva planta de romero. Utiliza una tierra compuesta por un 70% de turba y un 30% de arena. Como alternativa a la turba, puedes utilizar fibra de coco. Una vez llena la maceta, haz un pequeño agujero en el centro e introduce la ramita. No olvides regar con regularidad.
