¿Qué pasa si combinas un viejo rollo de papel higiénico con una percha? Conseguirás algo realmente útil. Sigue leyendo para descubrir de qué se trata.
Las perchas son accesorios domésticos muy útiles para colgar la ropa en armarios y roperos y evitar que se arrugue. Son imprescindibles para mantener el armario ordenado. De este modo, no tendrás que planchar ni doblar la ropa.
Las perchas tienen multitud de formas y, si no tienes el modelo adecuado, tu ropa no se mantendrá en su sitio y se formarán arrugas. Para que tu ropa luzca perfecta, elige perchas no demasiado estrechas y ligeramente redondeadas.
En casa, sin embargo, solemos encontrar perchas finas de metal o plástico. Este tipo de percha no tiene la parte redondeada, por lo que pueden aparecer arrugas porque la prenda no está bien relajada.
Pero si tienes tantas en casa, que no cunda el pánico, sólo tienes que combinarlas con un rollo de papel higiénico y listo. Aquí tienes todos los detalles.
1 rollo de papel higiénico es todo lo que necesitas para revolucionar la eficacia de tus perchas
Existen muchos tipos de perchas en el mercado, y las más eficaces son las que tienen una sección redondeada para evitar las arrugas en chaquetas y pantalones. Este no es el caso de las perchas finas que todo el mundo tiene en sus armarios. Sin embargo, para solucionar este problema necesitas unos simples rollos de papel higiénico.
Para ello, hazte con algunos rollos de papel higiénico viejos: sólo necesitas la parte de cartón. A continuación, coge unas tijeras o un cúter y córtalo verticalmente. Este paso es imprescindible para poder abrir el rollo de papel higiénico y fijarlo a la percha.
Si quieres colgar pantalones, instala 2 ó 3 rollos a lo largo de la tira donde normalmente los colocas. Para chaquetas y trajes, basta con colocar dos rollos en los hombros de la percha.
Después, pruebe a colocar la ropa en las perchas con los rollos de papel higiénico y admire el resultado. Su ropa ya no se arrugará gracias al rollo de papel higiénico, que creará el efecto redondeado de las perchas a la venta en los grandes almacenes.