Cebollas: ¡cultivarlas con este abono especial! ¡Mayor rendimiento y 0 plagas!

Si cultivas cebollas con este suplemento especial, ¡obtendrás una cosecha abundante y 0 plagas! ¡Te lo explicamos todo!

Puede que aún sea pronto para cultivar cebollas. Pero queremos hablarte de un suplemento que hará maravillas por tu cultivo de cebollas.

Potenciará su crecimiento, limitará las plagas y multiplicará su rendimiento. Siga leyendo para saber más sobre este producto secreto.

Cebollas: cómo cultivarlas para obtener un rendimiento muy alto

La mejor época para plantar cebollas es entre septiembre y octubre, sobre todo en otoño. Y si quieres plantarlas, te damos un consejo para que tus cebollas crezcan sin problemas. Tanto si utilizas semillas como cebollas pequeñas, éste es el procedimiento que debes seguir.

Prepara las cebollas para plantarlas. A continuación, necesitas micorrizas como suplemento especial. Se trata de un abono capaz de transmitir nutrientes a las plantas, sobre todo cobre, fósforo y zinc.

Utilizado en cantidades bastante pequeñas, este abono tiene la ventaja de ser de larga duración. Añádalo a la tierra con 5 gramos por planta. Es una etapa esencial antes de plantar nuevas cebollas.

Y no olvide enriquecer la tierra con antelación para que las plantas prosperen. El suelo necesita estiércol, humus y materia orgánica para que las plantas crezcan correctamente.

¿Cómo se cultivan las cebollas con micorrizas?

Al preparar la tierra, recomendamos utilizar ceniza. Es un producto que funciona bien con las cebollas y garantiza que crezcan bien. La ceniza también protege a las cebollas de los parásitos que pueden atacarlas.

El procedimiento es muy sencillo. Haz agujeros del tamaño de un puño para tus cebollas. A continuación, coloca la cebollita o las semillas y vierte las micorrizas. Basta con una pequeña cantidad para cada planta.

Coloca la cebolla encima del abono con la cabeza sobre las micorrizas y la cola en la parte superior. A continuación, cubra con un poco de tierra para envolver las micorrizas.

Después de este paso, añada la ceniza. Basta con esparcirla alrededor de la cebolla y añadir la tierra por encima. Por último, haz una especie de círculo alrededor de la planta con la ceniza para bloquear los parásitos.