Albahaca: ¡nunca la riegues así! Se pudrirá en 1 segundo

La albahaca es una de las plantas aromáticas imprescindibles en el alféizar de la ventana. En verano, su aroma suave y delicado la convierte en un acompañamiento infalible para platos frescos.

La albahaca: la planta aromática por excelencia

¿A quién no le gustaría tener una planta de albahaca en el alféizar de la ventana o en la cocina? La albahaca se utiliza en muchas cocinas, junto con otras hierbas aromáticas como el perejil y el romero. Es imposible pensar en tomates en conserva o en una pizza margarita sin unas hojas de albahaca.

Cultivar albahaca es especialmente sencillo y tiene muchas ventajas. Si tienes una planta de albahaca en el alféizar de la ventana o en el balcón, estarás a salvo de los mosquitos. Sin embargo, hay algunas precauciones que debes tomar para mantener tu planta sana y exuberante.

¿Cuándo debo regarla?

Coloca tu planta de albahaca en un lugar aireado, pero no bajo la luz directa del sol. Las hojas verdes de las plantas de albahaca no son resistentes. Pueden volverse negras o amarillas de golpe. Peor aún, pueden pudrirse, al igual que la propia planta. De hecho, la longevidad y la salud de la planta suelen depender del riego.

Cuando hace calor, la planta necesita mucha agua: unos dos riegos al día. Para saber cuándo una planta necesita agua, basta con tocar la tierra y comprobar si está seca o húmeda. Si está seca, riégala inmediatamente.

Pero tenga cuidado. Si las hojas empiezan a ennegrecerse o pudrirse, la planta se ha regado en exceso y morirá. La solución es exponerla al sol para que se seque. También puedes utilizar el método de acolchado utilizado en agricultura, colocando hojas o corcho en el suelo.

Si crees que es demasiado tarde y la planta de albahaca ya se está muriendo, lo único que puedes hacer es podarla, dejando sólo los nudos. Puedes esperar que surjan nuevas hojas.

Y si te vas unos días de vacaciones, puedes utilizar un método muy económico: el de la botella invertida. Si pasas más tiempo al aire libre, puedes utilizar el método de riego por goteo, que aprovecha la energía solar.