1 gota de este líquido es suficiente para devolver la vida a cualquier planta.

A pesar de todos los cuidados que les das a tus orquídeas, a veces se secan. Para salvarlas in extremis, aquí tienes el remedio natural que necesitas.

El remedio natural que te vamos a desvelar hoy consiste en preparar un líquido con propiedades mágicas capaz de devolver la vida a la mayoría de tus plantas.

Plantas secas y marchitas: ¿cómo revivirlas?

Aunque cuidemos bien de nuestras plantas a diario, a veces pueden secarse sin un motivo concreto. Afortunadamente, existen remedios 100% naturales para salvarlas rápidamente.

Hoy vamos a echar un vistazo a un remedio especial que consiste en crear un agua increíblemente potente. Sólo unas gotas de este líquido mágico salvarán tus plantas, especialmente tus orquídeas.

Las orquídeas pueden crecer en las condiciones adecuadas con sólo un poco de agua. Pero una vez que ha terminado de florecer, tu orquídea empieza a marchitarse y a morir.

Retira inmediatamente las hojas secas y saca la planta de la maceta. A continuación, corta todas las partes secas de la raíz y lava el resto con agua corriente. Séquelas y guarde las raíces en un lugar fresco y seco durante 24 horas.

¿Cómo se prepara esta agua especial para recuperar las orquídeas moribundas?

Necesitarás tres dientes de ajo, que deberás cortar con cuidado. A continuación, introdúcelos en un recipiente lleno de 1 litro de agua. Ciérralo cuidadosamente con una toalla y tápalo durante un día entero.

Una vez transcurrido este tiempo, filtra el líquido. A continuación, coloque la raíz de orquídea en el agua de ajo durante unos 20 minutos. El agua de ajo restante puede ponerse en un pulverizador y rociarse sobre todas las plantas para ayudarlas a crecer sanas y rápidamente.

Transcurridos 20 minutos, retire la raíz y séquela con un algodón. Déjelas al aire libre durante 30 minutos antes de plantarlas en una maceta adecuada con abono especial para orquídeas.

Riegue bien la tierra y coloque la maceta en un lugar con una temperatura de 20 grados, procurando siempre conservar la humedad y evitando la luz solar directa.

Para crear un ambiente húmedo para su planta, cree una especie de invernadero artificial para la maceta. Para ello, corta el fondo de una botella grande, hazle agujeros y cubre la maceta.

Al cabo de dos semanas, verás cómo se forman pequeñas hojas nuevas. Cada 10 días, puedes regar la planta con dos cucharaditas de agua de jengibre para estimular el crecimiento.