El uso de la lavadora se ha convertido en una práctica habitual en el día a día. Los días de lavar la ropa a mano, con jabón y fuerza bruta ya son cosa del pasado. Ahora confiamos la mayor parte de nuestra ropa a esta práctica máquina.
Sin embargo, hay ocasiones en las que algunas prendas especialmente sucias o manchadas requieren un tratamiento previo manual. Y no nos olvidemos de aquellas prendas delicadas que podrían estropearse en la lavadora por su fragilidad textil.
Dicho esto, la tendencia predominante es, por supuesto, confiar nuestra colada a la lavadora, esa máquina familiar de ventanilla que todos conocemos.
Hay varias maneras de obtener ropa suave y fragante. En este artículo te presentamos un método sorprendente. Con él no sólo tendrás la ropa limpia y perfumada, sino que también podrás ahorrar significativamente en gastos de supermercado. Y ahora, entremos en los detalles.
El método para conseguir una ropa suave y perfumada
En primer lugar, es fundamental dividir la ropa según el color y el tipo de tejido. De hecho, un pequeño error puede arruinar toda la carga. Ajustar la temperatura adecuada y seleccionar cuidadosamente la ropa es fundamental. Y es igualmente importante utilizar el detergente, la lejía y el suavizante adecuados en las secciones correspondientes del cajón de la lavadora.
Si bien estos productos son eficaces, también pueden resultar costosos. Pero aquí tienes un pequeño secreto: ¡puedes hacer tu propio detergente casero! Este detergente, elaborado con ingredientes naturales, puede dejar tu ropa suave y limpia desde el primer uso.
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¿Cómo hacerlo?
Empieza por hacerte con algún jabón natural, de los que se utilizan habitualmente para las manos o el rostro. Ralla un poco de este jabón. Mientras tanto, calentar un poco de agua, sin necesariamente llevarla a ebullición. Vierte el agua caliente y el jabón rallado en un recipiente de plástico grande.
Mezclar bien hasta que el jabón se disuelva por completo. Luego agrega un par de cucharadas de bicarbonato de sodio y la misma cantidad de bicarbonato de sodio, un potente agente limpiador. Finalmente, agrega unas gotas de aceite esencial de tu preferencia. El aceite de lavanda, por ejemplo, es perfecto para este fin.
Una vez que esté todo mezclado, deja enfriar la mezcla. Espera un par de horas antes de verterlo en un recipiente o botella. Sugerimos utilizar este detergente casero después de unas 24 horas, agitándolo si parece demasiado espeso.
Una vez listo, puedes sustituir tu detergente comercial por este producto natural. Te sorprenderán sus poderosas propiedades limpiadoras y el fresco aroma que deja en tu ropa. Este detergente es apto para diferentes ciclos de lavado, tanto para ropa blanca como para ropa de color. Solo recuerda mantener las proporciones correctas de ingredientes.