Utiliza zumo de limón para limpiar toda la casa

En el día a día, es habitual utilizar productos naturales que ya tienes a mano. De hecho, si eres fan de las soluciones naturales y respetuosas con el medio ambiente, tu despensa está llena de potentes ingredientes para limpiar toda la casa.

Uno de ellos es el zumo de limón, un cítrico fresco, perfumado y polivalente. Por eso es especialmente popular para la limpieza y el mantenimiento del hogar.

Descubra hoy todos nuestros consejos para utilizar correctamente el zumo de limón en todas las habitaciones y tener una casa impecable sin gastar un dineral.

Para eliminar la cal

Muchos productos tienen fama de eliminar la cal, pero los limones ofrecen resultados excepcionales. Este cítrico de piel amarilla tiene una acción desengrasante especial que neutraliza en un santiamén las manchas de cal incrustadas.

Para utilizarlo, vierta un poco de zumo de limón en la esponja y frote las zonas afectadas por la cal. Déjala actuar unos 5 minutos antes de limpiarla con una esponja limpia. Y, como por arte de magia, los restos de cal desaparecerán por completo.

Para dar brillo a la madera

Los limones pueden hacer que la madera brille y resplandezca. De hecho, este cítrico destaca por su increíble capacidad para hacer brillar la mayoría de superficies, como la madera. Es la solución más eficaz para limpiar la madera opaca o manchada.

Para ello, exprime el zumo de limón, fíltralo y viértelo en un recipiente. A continuación, moja un paño de microfibra en él y pásalo por las zonas a limpiar. Por último, aclara y tendrás una superficie que brilla como nunca.

Para abrillantar superficies de acero

El zumo de limón es el producto perfecto para limpiar cualquier superficie del hogar. Si puede hacer brillar la madera, puede hacer lo mismo con las superficies de acero.

Así que si tienes una superficie de acero que necesita un pulido para recuperar su antiguo brillo, el zumo de limón es tu aliado perfecto. Neutraliza todas las manchas y reduce los arañazos.

¿Cómo hacerlo? Coge un limón y pártelo por la mitad. Utiliza una mitad como una especie de esponja natural para limpiar la placa, el fregadero y todas las superficies de acero de tu casa. A continuación, utiliza una esponja limpia para eliminar cualquier resto antes de aclarar y secar con un paño de microfibra.