El ciclamen no es una planta clásica. Sus magníficas flores han inspirado a poetas y escritores para crear mágicos cuentos de hadas.
En efecto, esta bulbosa tiene fama de ser una hermosa planta de otoño e invierno, que produce bonitas flores rojas y blancas. Sin embargo, para conseguir esta floración, se necesitan muchos cuidados para que la planta se mantenga en perfecto estado de salud y conserve al mismo tiempo su magnífico aspecto.
La mayoría de nosotros ponemos ciclamen en el balcón y notamos que las hojas empiezan a amarillear y las flores se marchitan y caen una a una. Definitivamente, tu ciclamen se está secando.
Para evitar todo esto, puedes probar algunos remedios naturales como el truco de las hojas secas. Estos métodos te ayudarán a tener tu ciclamen en plena forma.
Truco de las hojas secas
Para evitar que el ciclamen de tu balcón se seque, uno de los métodos que recomiendan los jardineros es el truco de las hojas secas. Este tipo de acolchado se realiza con un puñado de hojas secas. Puedes añadir un poco de musgo y corteza. A continuación, extiende la mezcla sobre la superficie del suelo alrededor de tu planta en una capa fina pero densa.
Cuando bajan las temperaturas, los ciclámenes se estropean rápidamente, perdiendo sus hojas y flores, sobre todo si están colocados en el balcón. Por eso, si utilizas el truco de las hojas secas, este mantillo creará una capa protectora que preservará la temperatura constante del suelo, que oscila entre 13 y 17 grados. De este modo, podrás proteger tu ciclamen de la desecación durante los periodos de frío extremo.
Envolver las plantas durante el invierno
Si no tienes hojas secas para utilizar como mantillo, tienes otra opción más interesante: cubrir las plantas. ¿En qué consiste este método?
Cuando las temperaturas descienden por debajo de 0 grados, puedes envolver tu ciclamen en un tejido transpirable para protegerlo de las heladas y el frío. Sin embargo, se trata de una solución efímera, ya que estas cubiertas bloquean la luz solar, lo que puede dañar tu planta.
Por regla general, hay que mantener el ciclamen en el interior durante los meses de otoño e invierno. En cuanto llegue la primavera, sácalos al exterior.