La bisutería que tiene el color del metal que la compone puede oscurecerse debido a la oxidación, fenómeno que implica la pérdida de brillo, debido a una pátina oscura en la superficie.
Este fenómeno es frecuente en joyería de plata, latón, cobre o bronce. Generalmente el problema es reversible, en el sentido de que basta con quitar la pátina de óxido para devolverle a la joya su brillo original.
Remedios naturales para la bisutería oxidada
La bisutería oxidada se puede restaurar a su estado original con algunos remedios naturales comunes. Aquí hay algunas opciones a considerar:
Mezcla el bicarbonato de sodio con el agua hasta formar una pasta. Aplícalo sobre joyas oxidadas y frota suavemente. Enjuague bien y seque.
Mezcla el jugo de limón con la sal hasta que se forme una mezcla suave. Aplicarlo sobre bisutería y frotar suavemente con un cepillo suave o un cepillo de dientes. Enjuague bien y seque.
Deje las joyas en remojo durante 10 minutos en un recipiente con agua y aceite de oliva . Como alternativa al aceite puedes utilizar jabón líquido para manos .
Otro remedio natural implica el uso de peróxido de hidrógeno . Sumerja la bisutería oxidada en un recipiente lleno de agua caliente y 2 cucharadas de peróxido de hidrógeno durante 30 minutos. Frote suavemente con un cepillo de dientes viejo y enjuague bien.
Coloque una bolsita de té verde en agua caliente y deje las joyas oxidadas en remojo durante 30 minutos. Retirar suavemente y enjuagar bien.
Antes de aplicar cualquier tipo de producto sobre bisutería, es importante comprobar si el producto es apto para este tipo de limpieza.
En general, para evitar que las joyas se oxiden, es recomendable evitar usarlas mientras nos duchamos, nadamos o practicamos actividades acuáticas y nos las quitamos antes de dormir. También es importante no rociar perfume u otro tipo de productos corporales directamente sobre la bisutería. Este debe almacenarse en un lugar seco y limpio, alejado de fuentes de humedad y luz solar directa.