
Desde que adopté el estilo de vida de “hágalo usted mismo”, siempre busco formas naturales y sencillas de acelerar mis tareas domésticas.
¿Quién hubiera pensado que algo tan banal y cotidiano como un cubito de hielo podría convertirse en un hack casero versátil?
¡Veamos juntos cómo se deben utilizar!
Para quitar las marcas de la mesa de las alfombras
Imagínese mover un mueble y encontrar una huella casi indeleble en la alfombra de debajo .
Simplemente coloca un cubito de hielo donde sea necesario y deja que haga su trabajo. El frío estimulará las fibras de la alfombra, ayudándolas a expandirse y levantarse .
No esperes a que el hielo se derrita por completo, unos veinte minutos son suficientes, luego utiliza un cepillo para dar una buena pasada a las zonas tratadas, ¡dejando tu alfombra como nueva!
Para desprender fácilmente el chicle
¿Quién no se ha encontrado alguna vez con la necesidad de quitar chicles atascados en lugares no deseados? Desde las suelas de los zapatos hasta la base de una silla, pasando por los tejidos de la ropa. Sin embargo, he descubierto que usar cubitos de hielo casi resuelve el problema por sí solo.
Envuelve el cubo en un paño fino y presiónalo contra la goma durante unos minutos . El frío endurecerá el chicle haciéndolo menos pegajoso y mucho más fácil de quitar . Con paciencia y una herramienta no demasiado afilada podrás levantarlo por completo sin dejar rastro.
Para incrustaciones en sartenes
Cocinar es una pasión, pero a veces pueden ocurrir pequeños desastres, como olvidar algo en la estufa. Cuando esto sucede y nos encontramos ante un molde apelmazado, el hielo puede venir en nuestra ayuda.
Importante: si la sartén aún está caliente, espere hasta que esté al menos tibia para evitar choques térmicos que podrían dañarla.
A continuación, llénala de agua fría, añade unos cubitos de hielo y vuelve a ponerla al fuego. El contraste térmico ayudará a levantar las incrustaciones del fondo . Recuerda utilizar esta técnica sólo en sartenes que sean resistentes a los cambios de temperatura y no en las antiadherentes .
en la secadora
En un día agitado, encontrar una manera de evitar planchar puede salvarle la vida. Colocando un par de cubitos de hielo en la secadora junto a tu ropa, descubrirás un método eficaz para reducir las arrugas .
En teoría, el calor convierte el hielo en vapor, actuando sobre las telas como lo haría una plancha de vapor. Y listo, tu ropa quedará menos arrugada , lista para usar o guardar en el armario.
Para refrescar la casa
Ahora que hace mucho más calor, podríamos utilizar el truco del hielo para refrescarnos un poco .
Llena un bol con cubitos de hielo y añade unas gotas de tu aceite esencial favorito . Al colocar el bol frente a un ventilador , permitirás que la ligera brisa recupere el frescor del hielo y la fragancia de los aceites, difundiendo una agradable sensación de refrescante limpieza por todo el ambiente.
¡Evidentemente, coloque el recipiente a una distancia segura del ventilador para poder disfrutar del aire fresco con total seguridad!