¿Te has quedado sin detergente o pastillas para fregar? Que no cunda el pánico, porque estos trucos caseros te salvarán la vida sin que tengas que correr al supermercado a comprarlos.
Aunque quieras controlarlo todo en casa, pueden surgir imprevistos. Uno de los más habituales es darte cuenta, justo antes de empezar el programa del lavavajillas, de que te has quedado sin detergente o pastillas para fregar los platos. Y no siempre es agradable ver la máquina llena de platos, cubiertos y vasos sucios.
Sin embargo, hay algunos trucos sencillos que puedes utilizar para salir de esta situación sin tener que ir al supermercado a comprar un producto de sustitución.
El primer consejo es lavar a mano los platos y demás utensilios sucios. Pero si no tienes tiempo suficiente para esta tarea, hay otras soluciones más prácticas y eficaces.
3 ingredientes naturales que pueden sustituir a las pastillas de lavavajillas
Para ayudarte a lidiar con el problema de un lavavajillas sin detergente, aquí tienes tres consejos rápidos para limpiar la vajilla en poco tiempo utilizando productos que probablemente ya tengas en casa.
Estas soluciones son eficaces, fáciles de usar y baratas, pero no olvides que sólo deben utilizarse ocasionalmente. El uso excesivo de estos productos puede afectar al rendimiento de tu lavavajillas, aunque sean respetuosos con el medio ambiente.
Bicarbonato sódico
El primer método consiste en utilizar bicarbonato de sodio. Es un producto estrella en la limpieza del hogar. Se utiliza, por ejemplo, para blanquear la ropa, eliminar malos olores o quitar manchas difíciles de las cacerolas.
En el caso del lavavajillas, puede verter una cantidad generosa en el cajón del aparato y cerrar el compartimento para asegurarse de que el producto se dosifica correctamente. El resultado: una vajilla limpia, brillante y sin manchas.
Vinagre blanco
Gracias a sus propiedades desengrasantes y antibacterianas, el vinagre blanco es un producto infalible para una vajilla limpia. Añade una cantidad adecuada de vinagre en el cajón específico e inicia el ciclo de lavado.
Zumo de limón
La última opción es utilizar zumo de limón en lugar de detergentes industriales o pastillas. Toma media taza de zumo de limón bien colado y viértelo en el compartimento correspondiente. A continuación, pon en marcha el lavavajillas y tu vajilla quedará impecable.