Muchas veces hemos hablado del laurel como esa planta que, además de aromatizar los platos, tiene muchas propiedades que la convierten en un válido aliado para el hogar. De hecho, esta planta, gracias a los aceites esenciales contenidos en sus hojas, tiene propiedades antibacterianas y antifúngicas que la hacen eficaz para proteger el hogar del moho y las bacterias. Hoy veremos por qué representa un excelente aliado en casa y dónde se puede utilizar.
Cómo utilizar hojas de laurel en toda tu casa
Empecemos por ver cómo utilizarlo en la cocina. Con la llegada del verano, los insectos pronto volverán a visitarte y, además de deambular por casa, se colarán en la despensa poniendo en riesgo la integridad de los alimentos. Para evitar que esto suceda puedes utilizar las hojas de laurel como repelente natural, extendiéndolas en la despensa y reemplazándolas cuando se sequen.
Así como para insectos, en la cocina, para quitar los malos olores del horno. Colócalas en la bandeja del horno y déjalas cocer unos minutos a 180°C. Al abrir la puerta te inundará un agradable aroma a limpieza.
Pasemos al dormitorio . Incluso en este entorno puedes utilizarlo para mantener alejadas las polillas de armarios y cajones y guardar tu ropa. Coloca unas cuantas hojas entre tu ropa y gracias al fuerte olor que desprenden mantendrán alejados a los invitados insidiosos. Las hojas de laurel, si se colocan en el armario, también pueden ayudar a reducir la tasa de humedad evitando diversos mohos.
Un ambiente muchas veces sujeto a malos olores y humedad es el baño . En este contexto, el laurel puede ayudarte a reducir la humedad y darle al aire un aroma agradable. Pon algunas hojas en bolsas y distribúyelas en varias partes del baño. Para eliminar el olor a cloaca , sin embargo, puedes verter algunas hojas directamente en el desagüe.
El laurel también se puede utilizar en balcones y ventanas como repelente natural. Con su fuerte olor mantendrá alejados mosquitos, moscas, cucarachas y mosquitos. Por último, puedes utilizarlo para perfumar toda la casa colocándolo en la aspiradora. Arranca algunas hojas y colócalas en la bolsa de la aspiradora. Una vez encendido, el olor llenará tu hogar.