Solo tienes que hacer esto y toda la suciedad saldrá de la lavadora poco después.
Mantener la lavadora limpia es imprescindible para garantizar un rendimiento óptimo y prolongar su vida útil. La acumulación de residuos, detergente y moho no solo afecta la limpieza de la ropa, sino que puede causar olores desagradables. Con un método sencillo y efectivo, es posible eliminar toda la suciedad incrustada, recuperando la higiene y funcionalidad del electrodoméstico en poco tiempo.
Resumen rápido
- Categoría: Hogar y limpieza doméstica
- Nivel: Fácil
- Utilidad: Eliminar residuos y mantener la lavadora impecable para mejorar su eficiencia y evitar malos olores
Explicaciones detalladas
Punto 1:
El primer paso fundamental es realizar un ciclo de lavado vacío con agua caliente y vinagre blanco. Este método ayuda a disolver restos de detergente, suciedad y acumulaciones de cal, eliminando microorganismos responsables de malos olores. Se recomienda utilizar al menos una taza de vinagre para potenciar la limpieza y desinfección.
Punto 2:
Tras el ciclo con vinagre, se debe pasar otro ciclo con bicarbonato de sodio. Este compuesto actúa como un agente abrasivo suave que elimina residuos restantes y neutraliza olores. Es importante distribuir el bicarbonato directamente en el tambor para maximizar su efecto. Evitar mezclar bicarbonato y vinagre en el mismo ciclo para no perder su efectividad.
Punto 3:
Paralelamente, es esencial limpiar manualmente las zonas menos accesibles, como los sellos de goma, dispensadores de detergente y filtros de agua. En estas áreas suele acumularse moho y residuos que dificultan la limpieza general. Utilizar un paño húmedo con una solución de agua y vinagre o un producto específico para electrodomésticos garantiza la eliminación completa de suciedad.
Punto final:
Para preservar la limpieza, conviene mantener la puerta de la lavadora entreabierta después de cada uso, permitiendo la circulación de aire y evitando la proliferación de humedad y moho. Además, realizar esta limpieza profunda al menos una vez al mes es clave para conservar la lavadora en óptimas condiciones.
Variantes y consejos de expertos
- Como alternativa al vinagre, algunos prefieren usar lejía diluida para desinfectar, aunque debe usarse con precaución para no dañar las partes de goma.
- Incorporar pastillas desincrustantes específicas para lavadoras puede facilitar la eliminación de sarro en zonas difíciles.
- Para manchas persistentes, se recomienda un pretratamiento con jabonera desengrasante aplicada directamente en el tambor.
- Evitar el uso excesivo de detergente o suavizantes, pues pueden favorecer la acumulación de residuos en el interior.
- Comprobar periódicamente el filtro y limpiar cualquier pelusa o residuo que pueda obstruir el sistema de drenaje.
Aplicaciones y puesta en práctica
Este método es especialmente útil en hogares donde la lavadora se usa con frecuencia y está expuesta a aguas duras o acumula residuos de productos químicos. También resulta efectivo en entornos profesionales, como lavanderías pequeñas, donde la limpieza constante es crucial para el mantenimiento del equipo. La técnica es aplicable tanto en lavadoras de carga frontal como superior.
Notas complementarias
- Utilizar guantes al manipular vinagre o lejía para proteger la piel y evitar irritaciones.
- No dejar la puerta completamente cerrada tras la limpieza para evitar condensación; mantenerla ligeramente abierta ayuda a prevenir malos olores.