La seguridad a bordo de un coche u otro vehículo es algo sumamente importante, dado que de ello depende la vida de muchas personas. Cada día, millones de personas se suben a sus coches para llegar a otros destinos y es justo que puedan hacerlo con la mayor seguridad posible.
La industria automotriz debe cumplir con ciertos estándares para garantizar que sus automóviles tengan las medidas de seguridad adecuadas, y constantemente se desarrollan nuevos proyectos para aumentar cada vez más estos niveles de seguridad. Hoy en día todos los vehículos deben estar equipados con sistemas de seguridad, y estos se dividen en seguridad activa y seguridad pasiva.
Seguridad activa
Estos elementos sirven para evitar que se produzcan accidentes, por lo que se debe actuar antes de que surjan dichos problemas.
1. Control de tracción:
este sistema ayuda a evitar el deslizamiento de los neumáticos durante la aceleración y mejora la estabilidad del vehículo.
2. ABS:
Esta sigla indica el sistema antibloqueo y evita que los neumáticos se bloqueen durante la frenada, permitiendo así una mayor gestión direccional del vehículo.
3. Monitoreo de la presión de los neumáticos:
Este sistema verifica constantemente la presión del aire presente en las ruedas. En caso de anomalías, una señal alertará inmediatamente al conductor, que podrá actuar.
4. Alerta de colisión frontal:
Este sistema de seguridad utiliza sensores que detectan la posible proximidad de un elemento en la parte delantera del vehículo, permitiendo al conductor realizar una maniobra evasiva y así evitar colisiones.
5. Frenada automática de emergencia:
Este sistema detecta situaciones de peligro inminente y si se alcanzan determinadas circunstancias activa automáticamente los frenos del coche, para evitar colisiones.
Seguridad pasiva
Estos sistemas se activan si los anteriores no fueran suficientes para evitar un accidente y por tanto sirven para minimizar las consecuencias de este último.
1. Estructura y chasis del vehículo:
Los coches modernos incorporan diversos sistemas de seguridad en el chasis del que están fabricados. Su estructura está diseñada para distribuir los impactos de forma específica, absorbiendo la energía de la colisión de forma que se proteja a las personas que se encuentran en el interior del habitáculo.
2. Cinturón de seguridad:
Este es probablemente el elemento de seguridad pasiva más conocido. La función de los cinturones de seguridad es realmente sencilla y es evitar que las personas que se encuentran en el coche sean sacudidas o expulsadas del mismo durante un accidente.
3. Airbags:
Desde hace algunos años estos elementos son obligatorios en todos los coches. En caso de accidente, el despliegue de los airbags reduce el movimiento de las personas a bordo del vehículo, limitando los daños por impacto.