Si no quieres tener halos en tu vaso debes evitar cometer estos errores que mucha gente comete

errores-al-lavar-ventanas

De por sí, limpiar cristales no es lo más fácil ni lo más rápido, de hecho, ¡hay días en los que realmente no queremos mirarlos!

Por no hablar de las veces que procedemos a una limpieza a fondo, pero luego nos damos cuenta de que hay manchas  ¡una pesadilla!

Pero ¿ cómo podemos evitar que queden rayas en el cristal que nos hagan repetir el lavado una y otra vez?

Bueno, ¡veamos qué errores nunca debes cometer!

No a limpiar al sol

¡Lo primero que tendrás que tener en cuenta es que lavar las ventanas bajo un sol demasiado fuerte es contraproducente!

De hecho, los rayos del sol contribuyen a la formación de halos ya que el calor seca el agua rápidamente y antes de que se pueda completar una limpieza a fondo.

Además, la fuerte luz de los rayos del sol te mostrará que el cristal siempre está brillando, haciendo que no notes los halos que, si están presentes, sólo se verán después de un tiempo.

Por eso, prefiere las horas del amanecer o del anochecer, o cuando haya luz pero no excesiva.

Evite las esponjas agresivas

El vidrio es un material muy delicado y como tal debe ser tratado.

Por este motivo está absolutamente prohibido utilizar esponjas agresivas para limpiar los cristales, ¡incluso si están muy sucios!

En general es recomendable lavar primero con un paño de microfibra y luego secar con paños de algodón.

Sin embargo, si la suciedad es muy rebelde, puedes utilizar una esponja suave como la que también utilizas en la ducha.

Desprecia el polvo

Cuando lavas los cristales después de mucho tiempo, ¡siempre cometes el error de descuidar el polvo!

Este último hay que retirarlo antes del lavado , de lo contrario el agua se ensuciará inmediatamente y la pasarás de una parte del vaso a otra sin limpiarlo eficazmente.

Por este motivo es aconsejable quitar primero el polvo con un paño de lana o un paño muy suave y luego pasar a lavar cuidadosamente el cristal.

No diluir los ingredientes.

Otro error muy común es utilizar demasiado producto a la hora de limpiar cristales.

Los ingredientes que prefiramos, como el jabón de Marsella, el vinagre, el bicarbonato de sodio, el talco, etc., ¡siempre deben diluirse en agua!

Si se utilizan directamente sobre vidrio, el resultado será que no secarán bien y las marcas serán aún más evidentes.

Así que ten cuidado y, si es posible, utiliza agua desmineralizada.

Utiliza papel de cocina o servilletas.

¿Otro error que penaliza el cristal y produce rayas ? ¡Usa papel de cocina o servilletas para limpiarlos!

Este, lamentablemente, es un hábito más extendido de lo que parece, sobre todo cuando se quiere hacer una limpieza rápida.

El papel, de cualquier tipo, deja pequeños trozos esparcidos sobre el cristal y cuando se seca, ¡el cristal estará más sucio que antes!

Una solución podría ser utilizar un trozo de camiseta vieja de algodón.

Nunca agua fría

¡El último error que nunca debes cometer es usar agua fría para lavar las ventanas!

Esto se debe a dos razones principales, la primera está relacionada con el tema de diluir siempre los productos de los que hablábamos antes.

En agua caliente los ingredientes no se disuelven bien y por tanto no tendrás la eficacia deseada.

El segundo motivo es que, por lo general, el agua fría no tiene el mismo poder desengrasante que el agua caliente .

Advertencias

Para no dañar ni manchar el vidrio, le aconsejo que primero pruebe los remedios en rincones poco visibles.