Mucha gente sigue preguntando y solicitando si es posible volver a congelar alimentos que han sido descongelados . La respuesta es siempre la misma, resignate: NO. No se pueden volver a congelar alimentos que han sido descongelados porque estos cambios de temperatura provocan el crecimiento bacteriano que inevitablemente conduce a la intoxicación alimentaria. El único caso en el que, quizás, sea posible hacer esto, es cuando el alimento está bien cocinado entre las dos congelaciones .
Pero incluso en este caso es bueno recordar que la cocción reduce en gran medida la carga bacteriana de los alimentos, pero no la elimina por completo.
¿Por qué no podemos volver a congelar los alimentos descongelados?
Mucha gente está convencida de que congelar los alimentos mata todas las bacterias . Lo cual no es cierto en absoluto. La congelación de los alimentos prolonga su vida útil al ralentizar su deterioro . Sin embargo, las temperaturas que se pueden alcanzar en nuestros frigoríficos domésticos, o mejor dicho en nuestros congeladores, llegan a un máximo de -18°C. A esta temperatura, el frío ralentiza y detiene el crecimiento de las bacterias, pero ciertamente no las mata .
Cuando luego procedemos a descongelar los alimentos , estas bacterias, aún vivas, están a la temperatura perfecta para proliferar rápidamente (de 20 a 50°C las bacterias prosperan). Lo que significa que cuando descongelamos un alimento, las bacterias presentes en él (y siempre las hay, por muy fresco que esté el alimento congelado) empiezan a multiplicarse de nuevo.
Es también por este motivo que recomendamos siempre descongelar los alimentos en el frigorífico . De hecho, si los descongelamos al aire, las bacterias crecen muy rápidamente . Otra cosa que debes hacer con los alimentos descongelados es cocinarlos lo antes posible antes de consumirlos, para evitar altos niveles de crecimiento bacteriano.
Lo que NUNCA debes hacer es volver a congelar alimentos descongelados . Al hacerlo, de hecho, volvería a congelar alimentos con una alta carga bacteriana. Y cuando lo descongeles nuevamente, todas estas bacterias comienzan a crecer nuevamente.
En teoría, sin embargo, si usted cocina un alimento descongelado y luego lo vuelve a congelar, esa cocción intermedia debería haber reducido la carga bacteriana a niveles tolerables. Sin embargo, es mejor no jugar a este juego demasiado a menudo: pequeños errores de cocción pueden anular esta reducción de la carga bacteriana, exponiéndonos al riesgo de intoxicación alimentaria .