Hoy en día no se ven muchos cubiertos de plata. Sin embargo, aún pueden utilizarse en ocasiones especiales.
Antes de sacar la cubertería de plata para una cena importante, ¿te preguntas cómo lavarla para que vuelva a brillar? ¿Se pueden lavar los cubiertos de plata en el lavavajillas?
Todas las respuestas a estas preguntas están en este artículo. ¡Feliz lectura!
Cubiertos de plata en el lavavajillas: ¿es una buena idea?
Antes de recibir a tus invitados y poner la mesa, ¿piensas meter tus tenedores, cucharas, cuchillos, bandejas y cuencos de plata en el lavavajillas? Pues estás cometiendo un grave error si crees que puedes lavarlos rápidamente y sin esfuerzo en el lavavajillas.
Este electrodoméstico tiene un ciclo de lavado normal que utiliza altas temperaturas durante mucho tiempo. De este modo, los ingredientes activos del detergente se esparcen por la cesta donde se guarda la vajilla. Sin embargo, las pastillas y el detergente que utiliza durante el lavado contienen agentes químicos que pueden dañar los objetos de plata.
Los productos químicos son agresivos y, cuando entran en contacto con la plata, pueden provocar su oxidación y la formación de una pátina opaca y ennegrecida. Esta pátina es muy difícil de eliminar y arruina el aspecto de la plata.
El mismo problema surge si, además de detergente, utilizas otros productos opcionales. Si utiliza vinagre o ácido cítrico en lugar de su detergente habitual, tenga en cuenta que es una mala idea, ya que estos productos también pueden provocar oxidación en la superficie de los objetos.
¿Cómo lavo los cubiertos de plata para evitar que se dañen?
Si quiere limpiar bien los cubiertos de plata, la única forma segura es a mano. Lave los cubiertos con agua templada y jabón suave y séquelos con un paño suave.
Los objetos de plata suelen quedar opacos después de lavarlos con agua, por lo que debes tratarlos adecuadamente para devolverles su brillo. Si buscas un remedio eficaz para que tu plata brille, nada mejor que el bicarbonato de sodio.
Aplica un poco de bicarbonato en la superficie y empieza a pulir con un paño seco de terciopelo o fieltro. Después, guarda tus objetos de plata lejos de la luz.