¡Recicla así las viejas macetas de plástico! ¡Es un método del que no te arrepentirás!

Si tienes viejas macetas de plástico en el balcón o en el jardín, a continuación te explicamos cómo reciclarlas de forma original.

¿Te has dado cuenta de que tienes varias macetas de plástico abandonadas porque las plantas se han podrido? Puedes reciclarlas de forma ingeniosa dándoles una utilidad.

Macetas de plástico viejas: ¿para qué sirven?

Las macetas de plástico son muy útiles en tu jardín o balcón para cultivar plantas. Disponibles en varios tamaños y colores, estas macetas tienen agujeros en el fondo para el drenaje del agua. Esto permite que el agua drene y que las plantas no se pudran al regarlas.

En los centros de jardinería, las macetas de plástico suelen utilizarse para plantar plantones. Después, hay que trasplantarlas a macetas más grandes, como las de terracota.

Y cuando te sobren muchas macetas de plástico vacías, no las tires, recíclalas para que vuelvan a ser útiles en el jardín.

¿Cómo se reciclan las macetas de plástico viejas?

Para ello, necesitas macetas de plástico y unas tijeras resistentes para hacer un corte diagonal en la maceta que quieras reutilizar.

Después del primer corte, haz un segundo justo al lado del mismo tamaño. Con las tijeras, corta hasta el fondo de la maceta y une los dos cortes para hacer una especie de triángulo diagonal en la maceta.

A continuación, haz agujeros a lo largo de los cortes como si fueran ojales de zapato. A continuación, pasa un hilo en forma de X por los agujeros como si fueras a ponerte los cordones de los zapatos.

Rellena la maceta con espuma de poliestireno y tierra para macetas. Coloca algunos tallos de suculentas en la hendidura delimitada por el alambre y empújalos hacia la tierra. Añade tierra poco a poco y humedécelo todo con un pulverizador.

Una vez que la maceta esté llena y la hendidura bien cubierta de suculentas, inserta unas cuantas raíces en la parte superior de la maceta. También puedes decorar la maceta con piedras para embellecer tu arreglo. Añade otros bulbos de tu elección, dependiendo del tamaño de la maceta. Lo mejor es plantar ramitas suculentas, que crecen y echan raíces rápidamente. También puedes utilizar arena o grava.