
¿Alguna vez has oído hablar de alguien que use sal en su lavavajillas?
Esta acción es realmente muy útil y podría resultar verdaderamente eficaz para algunas funciones específicas. Si tienes curiosidad por saber para qué sirve y sobre todo, cómo hacerlo, para utilizarlo a tu favor, sólo tienes que leer y descubrirlo.
¿Para qué sirve la sal en el lavavajillas?
Al contrario de lo que podría pensarse, la sal no sólo sirve para dar sabor a nuestros alimentos, sino que también tiene muchas otras funciones, que pueden ayudarnos en la limpieza diaria. Un tipo concreto de sal puede resultar increíblemente útil para la protección y mantenimiento del lavavajillas y sus funciones son realmente indispensables.

Gracias a él, de hecho, es posible retener la cal, normalmente presente en el agua.
La cal es un problema para cualquier aparato y en el lavavajillas puede provocar obstrucciones que impidan su correcto funcionamiento. Por este motivo, al introducir sal en su interior, podemos ayudarnos de un aparato llamado “suavizante”.
Este tiene la función de tratar el agua, mediante resinas de intercambio iónico, para bloquear sustancias como el calcio y el magnesio, principales responsables de la formación de piedra caliza.
La sal es capaz de regenerar las resinas de intercambio iónico y por tanto mejora y reequilibra las funciones del suavizante.
¿Pero cómo utilizar la sal?
La mejor forma de utilizarlo es introducirlo en un compartimento específico, propio de todo lavavajillas, que se encuentra en la parte inferior. Este está conectado directamente al sistema descalcificador de agua y durante las fases de lavado, el calor del agua disuelve la sal, sin que esta entre en contacto con los materiales presentes en su interior.
LEER TAMBIÉN Lavar el edredón: 10 consejos a tener en cuenta
Una vez finalizada su función, esta será expulsada con el agua del desagüe. Evidentemente no es necesario utilizar sal en cada lavado, y la frecuencia depende tanto del modelo de lavavajillas como de la calidad del agua. En algunos modelos hay una luz que indicará cuándo es necesario utilizarlo, pero suele ser recomendable hacerlo al menos una vez al mes.
¿Pero qué tipo de sal deberías utilizar?
Evidentemente no se debe utilizar la sal que utilizamos para cocinar, ya que sus granos son demasiado finos. El ideal se vende directamente para lavavajillas y estará disponible para su compra en cualquier tienda de mejoras para el hogar.