Si su orquídea ha perdido todas las hojas, no se desespere porque aún puede salvarla.
Las orquídeas pueden perder las hojas por diversos motivos. Sin embargo, no la tire todavía. Salvar una orquídea que ha perdido todas sus hojas requiere tiempo y esfuerzo, pero merece la pena.
Voy a contarte cómo revivir tu orquídea sin hojas y devolverle su fuerza en poco tiempo.
¿Cómo recuperar una orquídea sin hojas?
Estos son algunos pasos a seguir si tu orquídea ha perdido todas sus hojas y quieres conservarla.
Compruebe el estado de las raíces y el tallo
Saque la orquídea de la maceta y compruebe las raíces y el tallo. Esto le dará una idea de las posibilidades de supervivencia de su planta. ¿Están sanas las raíces y el tallo?
Si el tallo principal sigue firme y verde, la orquídea aún puede desarrollar nuevas hojas. Las raíces pueden transmitir nutrientes al tallo para estimular un nuevo crecimiento.
Si el tallo está amarillo y quebradizo, es señal de podredumbre o enfermedad. En este caso, es difícil, si no imposible, esperar que crezcan nuevas hojas de un tallo enfermo.
En cuanto a las raíces, se necesitan raíces sanas para absorber todos los nutrientes necesarios para fomentar el crecimiento de nuevas hojas. De lo contrario, tu planta no tendrá medios para regenerarse.
Por tanto, corta las partes infectadas con tijeras esterilizadas.
Enjuaga y limpia las raíces
Ahora tienes que limpiar la planta y trasplantar la orquídea.
Retire con cuidado las partes de la planta que estén marrones y secas. Si la orquídea aún tiene flores o tallos, córtelos. De este modo, la orquídea concentrará su energía en el crecimiento de las raíces y las hojas, en lugar de en la producción de flores.
Deje sólo las raíces firmes y verdes e intactas las raíces aéreas.
Después de cortar todas las partes muertas de la orquídea, enjuague suavemente la planta con agua tibia. Puede utilizar un barreño con agua o simplemente lavarla bajo el grifo del lavabo.
Trasplantar la orquídea en una nueva maceta
No reutilice la tierra vieja de la maceta, sobre todo si las hojas de su orquídea se han caído debido a la podredumbre.
Deseche la maceta y la tierra que la contiene, ya que puede haber restos de hongos, moho o bacterias en la tierra vieja.
Cuando la orquídea esté lista, colóquela en una maceta nueva, limpia y con corteza bien hidratada.