Prueba estos remedios naturales para alegrar los platos de ducha amarilleados por la cal y el moho.

El cuarto de baño es una de las estancias de la casa que utilizamos casi a diario, por lo que está en contacto constante con el agua. Como consecuencia, en esta estancia se pueden observar depósitos de cal, así como la proliferación de moho y otros gérmenes.

Esto se aplica a la mayoría de los sanitarios, especialmente a los platos de ducha, que a menudo se vuelven muy amarillentos. En este artículo, te propondremos algunos remedios naturales que eliminarán estas incrustaciones de forma fácil y eficaz.

Eliminar la cal de los platos de ducha

Si tu plato de ducha se está volviendo un poco amarillo, se debe principalmente a los depósitos de cal en la superficie. Afortunadamente, existen remedios naturales que pueden solucionar este problema sin dañar los materiales. Además, el uso de estas soluciones naturales es totalmente respetuoso con el medio ambiente y la salud.

Vinagre

Si tu plato de ducha tiene incrustaciones de cal, debes saber que productos ácidos como el vinagre o el ácido cítrico pueden devolverlo a su estado original en muy poco tiempo.

Para ello, mezcla vinagre blanco y agua a partes iguales. O diluye 150 gramos de ácido cítrico en 1 litro de agua. A continuación, pulveriza el producto resultante sobre la superficie amarillenta con un pulverizador. Deja actuar el producto durante 15 minutos, luego frota con una esponja suave y aclara.

Zumo de limón

Si combinas zumo de limón con bicarbonato sódico, obtendrás un potente remedio natural para eliminar la cal del plato de ducha.

Mézclalos y obtendrás una pasta espesa que puedes aplicar por toda la superficie, prestando especial atención a las zonas que estén muy amarillas. A continuación, frota suavemente con un cepillo de dientes suave o una esponja no abrasiva para eliminar las manchas.

Jabón de Marsella

Para volver a blanquear tu plato de ducha, puedes utilizar jabón de Marsella. Basta con disolver unos copos de jabón en un poco de agua tibia.

Después, con una esponja, frota suavemente la superficie y tendrás un plato de ducha perfectamente blanco.

Eliminar el moho de la ducha

Si buscas un remedio blanqueador para deshacerte de los platos de ducha amarillentos y oscurecidos, prueba con bicarbonato sódico.

Prepara una pasta homogénea combinando el bicarbonato con agua y extiéndela sobre la superficie del plato de ducha. Déjala actuar durante 15 minutos antes de frotar con una esponja suave o un cepillo de dientes.