A menudo se dice que las mejores cosas son las que se hacen en casa. Esto es especialmente cierto cuando se trata de abonos para tus plantas. Los expertos aconsejan fabricar tu propio abono orgánico, pero no comprarlo caro. ¿Cómo hacerlo?
Compartimos contigo este sencillo procedimiento para elaborar el mejor abono orgánico para conseguir tomates y pepinos prósperos y abundantes.
¿Plantas pepinos y tomates? Descubre hoy esta solución barata y fácil de hacer que puede darte resultados excepcionales.
En este artículo, le mostraremos cómo crear el mejor y más económico abono orgánico con sólo unos pocos ingredientes.
¿Qué es el abono orgánico?
El abono orgánico es un producto 100% natural que se utiliza para nutrir las plantas y mejorar la calidad del suelo. Al tratarse de un producto natural, no contiene sustancias nocivas ni tóxicas y es totalmente respetuoso con el medio ambiente. El abono orgánico ofrece innumerables ventajas con respecto a los abonos químicos.
Empezando por su contribución directa a que las plantas estén más sanas y fuertes gracias a toda la gama de nutrientes esenciales que ofrece, como nitrógeno, fósforo y potasio. Como resultado, sus plantas crecerán sanas y rápidamente, al tiempo que seguirán siendo resistentes a diversas enfermedades.
El abono orgánico también puede mejorar la calidad del suelo al potenciar la actividad de los microorganismos beneficiosos que se encuentran en él. Trabajarán juntos para descomponer la materia vegetal y convertirla en un abono nutritivo.
Prepare el mejor abono orgánico en casa
Para hacer el mejor abono orgánico en casa, todo lo que necesita son unos pocos ingredientes de bajo coste. No necesita gastar una tonelada de dinero en abono químico caro.
Todo lo que necesitas es un cubo, hierba recién cortada y agua. Durante el proceso de compostaje, utiliza un recipiente de plástico, que permanece neutro durante el proceso de fermentación.
Para prepararlo, llena el cubo hasta las tres cuartas partes con hierba cortada y cúbrelo completamente con agua. Para activar la fermentación, añada un poco de azúcar, levadura y corteza de pan triturada. Añade una pequeña cantidad de ceniza de madera para que el abono sea más potente.
Al cabo de unas dos semanas, el abono estará listo. Utilízalo diluyéndolo en agua a razón de 1 litro por cada 10 litros de agua. Es perfecto para plantas hortícolas como tomates y pepinos.