Una infusión de té es el consuelo que el cuerpo se merece en esta época invernal, en la que el organismo se pone a prueba. No sólo mantiene el calor, sino que también proporciona una sensación de bienestar y calma. Como alternativa al café o la leche, el té puede tomarse en el desayuno o como tentempié. Para sacar el máximo partido a tu bebida favorita, debes saber cómo prepararla…
Infusionar el té: ¡no vuelva a cometer este error!
Puede que te sorprenda, pero hay algunas reglas específicas que debes seguir a la hora de preparar el té. Según un creador de contenidos en Tik Tok, no debes sumergir la bolsita de té directamente en agua hirviendo.
En lugar de eso, hay que tirar de los dos extremos y apretarlos. Estas son las dos hebras que aparecen en el envase. Gracias a este proceso, podrás liberar el sabor del té.
¿Qué debo tener en cuenta?
La infusión del té no debe hacerse con prisas. De hecho, según la cultura oriental, la preparación del té es un auténtico ritual de bienestar. Respetando esta tradición, los beneficios para su bienestar son innumerables. Renueva el cuerpo y el espíritu.
Lo ideal es tomarse el tiempo necesario para oler el té y sorber la bebida caliente. También puedes optar por la versión en hojas sueltas, que puedes comprar en herboristerías.
Para disfrutar de una buena taza de té, utiliza agua fresca y desmineralizada. De este modo, el té será ligero, de gran sabor y no tendrá cal.