¿Por qué el lavavajillas mancha tus cubiertos? ¡Los trucos de la abuela para que vuelvan a brillar como nuevas!

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¡ El  lavavajillas  es un electrodoméstico del que nunca podríamos decir adiós! Esto se debe a que hace que las cosas sucedan muy rápido para nosotros, ¡especialmente en días críticos como los domingos o festivos cuando ensuciamos mil utensilios y sartenes!

Su uso continuo y diario, sin embargo, en ocasiones puede ocasionarnos algunos problemas.

Uno de ellos, sin duda, se refiere a  los cubiertos que se manchan después del lavado . Muchas veces nos vemos obligados a volver a lavarlos a mano para no tener que realizar otro ciclo.

Si a ti también te ha pasado esto, no debes preocuparte, porque hay maneras de no volver a tener estas desagradables sorpresas.

¡Veamos juntos  por qué el lavavajillas mancha los cubiertos y cómo limpiarlos !

¿Por qué se manchan?

El principal motivo  por el que se manchan los cubiertos en el lavavajillas  es el agua llena de cal .

Sabemos que este último muchas veces se adhiere a las superficies acumulándose cada vez más, cuando está presente en cantidades considerables en el agua no se desprende y por tanto mancha los cubiertos u otros utensilios de acero.

El acero , en concreto, no siempre es capaz de repeler la acción de la piedra caliza, por lo que es el material que más se ve afectado.

Por lo tanto, puedes en primer lugar realizar un lavado en vacío con ácido cítrico o bicarbonato  una vez al mes para  limpiar el lavavajillas . 

Ácido cítrico

Primero veamos cómo el ácido cítrico  puede ayudarnos y ser muy efectivo con los problemas de manchas  en los cubiertos.

También se suele utilizar para la lavadora , tanto para limpiar el propio aparato como para lavar la ropa.

Pues lo único que tienes que hacer es preparar una solución con  150 gramos de ácido cítrico  disueltos en  un litro de agua .

Utiliza la mezcla obtenida  en lugar del abrillantador  en la cubeta correspondiente y verás que el resultado será excelente.

papel de aluminio

El remedio que utiliza la abuela para mantener siempre los cubiertos brillantes es  el papel de aluminio .

Realmente es un método muy sencillo que te ahorrará tener que lavar a mano la mayor parte del tiempo.

Todo lo que necesitas hacer  es colocar una bola de papel de aluminio  en la bandeja pequeña en la que colocas los cubiertos. Durante el lavado, toda la cal quedará retenida por el aluminio y los cubiertos volverán a brillar.

Lavar a mano

Si después de encontrar  manchas en tus cubiertos , prefieres limpiarlos  lavándolos a mano , ¡te doy algunos remedios sencillos y rápidos para que queden como nuevos!

Bicarbonato

¡El bicarbonato  sólo puede ser  la primera opción en este caso!

De hecho, su acción ligeramente abrasiva y limpiadora conseguirá limpiar los cubiertos en poco tiempo .

Tendrás que  sumergirlos en un recipiente lleno de agua caliente , luego agregar  2 cucharadas de bicarbonato de sodio  y dejar en remojo durante 10 minutos.

Una vez pasado el tiempo, enjuágalas con agua corriente y sécalas con un paño suave, preferiblemente de lana.

Vinagre

Como alternativa al bicarbonato de sodio, también puedes usar vinagre , te recomiendo el blanco, para que tengas una acción efectiva en poco tiempo.

¡El vinagre, con su  acción desengrasante  , te hará decir adiós a las manchas!

Remoja  los cubiertos durante 20 minutos en  agua caliente  y  medio vaso de vinagre , luego enjuágalos y sécalos bien con un paño limpio.

También puedes poner vinagre directamente sobre la esponja y lavarlas, en caso de que queden manchas difíciles.

Limón

Por último, pero no menos importante, ¡veamos el  remedio del limón !

Al igual que el vinagre, el limón también es muy eficaz en estos casos.

Puedes  poner jugo de limón en una esponja  y frotarla sobre las manchas con el lado no abrasivo, luego de lo cual tendrás que enjuagar y secar.

Alternativamente, remoja los cubiertos  en agua caliente y el jugo de un limón , déjalos por 20 minutos y luego lávalos y sécalos.

Advertencias

Comprueba siempre el material de los cubiertos para comprobar si se necesitan diferentes tipos de lavado. Si las manchas son demasiado