El papel de aluminio es útil para una amplia variedad de cosas. Además del clásico uso en la cocina, es muy habitual encontrarlos en las peluquerías a la hora de teñirse el pelo. Pero también hay otro uso que se le puede dar al papel de aluminio y es que sirve para conservar nuestra ropa.
Pues sí, quizás no todo el mundo sepa que el aluminio puede ser de gran ayuda a la hora de proteger nuestra ropa. De hecho, cuando los lavamos en la lavadora, muchas veces puede ocurrir que salgan electrizados o estropeados.
Esto ocurre debido al roce de los tejidos dentro de un mismo aparato que, a la larga, puede provocar su electrificación. Gracias a este sencillo método conseguiremos que toda la electricidad sea absorbida por el papel de aluminio, evitando así que nuestra ropa se vea afectada.
Basta con crear tres bolitas, del tamaño de una pelota de golf, colocarlas dentro de la cesta y proceder con el lavado habitual. Si vamos a lavar ropa que tiende a adquirir mucha electricidad, es recomendable utilizar suavizante y evitar el centrifugado demasiado agresivo.
Habitualmente el lugar donde se acumula mayor cantidad de electricidad estática es la secadora y por eso es preferible, en caso de faltar el papel secador adecuado, introducir estas bolas de aluminio.
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Creando estas tres bolas e introduciéndolas dentro de la lavadora o secadora conseguiremos proteger nuestra ropa, evitando además dañar no sólo los tejidos, sino también los electrodomésticos y nuestra salud, ya que este material no resulta nocivo. .
A pesar de ser un elemento químico, el aluminio no es perjudicial para nuestro organismo si se utiliza de esta forma. Pero este no es el único uso que se le puede dar a las láminas de papel de aluminio, de hecho es posible utilizarlas para quitar manchas rebeldes, para afilar las hojas de tijeras o cuchillos o incluso para limpiar la plancha.