El horno es uno de los electrodomésticos más utilizados en nuestros hogares y por ello conviene mantenerlo constantemente limpio. Sin embargo, el uso frecuente de detergentes puede dejar olores fuertes. Por eso es bueno dejarlo airear después de limpiarlo, pero no sólo eso: existen algunos trucos naturales que puedes utilizar para eliminar los olores no deseados.
Pan y vinagre al horno.
El pan tiene una excelente capacidad para absorber olores , por lo que puede resultar excelente colocarlo dentro del horno después de limpiarlo. Precaliéntalo a 180 grados durante 10 minutos mientras remojas una rebanada de pan en el vinagre. Luego introducir en el interior y dejar actuar toda la noche.
Alternativamente, si no tienes pan, puedes usar solo vinagre. Simplemente precalienta el horno hasta que esté tibio y coloca un recipiente con vinagre durante la noche. Una vez que sigas uno de estos dos trucos, ¡los malos olores habrán desaparecido!
Cáscaras de manzana y limón
La manzana y el limón son dos frutas particularmente fragantes y, por lo tanto, excelentes para eliminar los malos olores. Pela una manzana y un limón y coloca las cáscaras en una fuente para horno. Mételo en el horno y caliéntalo a 180 grados durante 10 minutos, luego deja enfriar sin abrir. Al cabo de aproximadamente una hora, al abrirlo notarás un olor fresco y agradable.
Bicarbonato
El bicarbonato puede tener muchas aplicaciones en casa, de hecho es excelente como abrillantador pero también como desodorante. Gracias a su capacidad para eliminar los olores más desagradables, el bicarbonato de sodio puede ser excelente para limpiar tu horno.
Simplemente introduce un bol con 5 cucharadas de bicarbonato diluido en agua en el horno precalentado y déjalo en el horno durante aproximadamente una hora. La mezcla formará un vapor que eliminará incluso los olores más rebeldes.
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vainilla en el horno
La vainilla suele ser conocida por sus múltiples usos en la cocina, pero puede tener otras aplicaciones. De hecho, gracias a su excelente aroma, unas gotas de extracto de vainilla serán suficientes para eliminar los olores.
Llena una cacerola con agua y unas gotas de extracto de vainilla, colócalas en el horno y calienta hasta que empiece a hervir. En este punto, apaga y espera toda la noche: el vapor eliminará los olores químicos de los desinfectantes.
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