Mucha gente probablemente esté acostumbrada a recalentar pan congelado en el microondas. Esto es algo que no debería volver a hacer nunca.
El horno microondas es un electrodoméstico útil y práctico para el día a día. Sin embargo, no siempre se puede utilizar de la forma deseada.
Algunos alimentos con sus peladuras no se pueden calentar en el microondas porque pueden explotar de un minuto para otro. También tienes que asegurarte de que sólo utilizas materiales adecuados dentro del aparato. El aluminio, los envases de comida rápida o de restaurantes chinos, el cristal o incluso la cerámica no pueden utilizarse en este aparato.
Aunque los hornos microondas son muy útiles y consumen menos energía que los hornos convencionales, su uso tiene límites. Descubre hoy por qué no es adecuado para alimentos con levadura, como el pan.
¿Pan congelado en el microondas? Esto es lo que pasa si lo intentas
El pan forma parte de nuestra dieta diaria. Sano y sabroso, está presente en todas las comidas del día.
Para ahorrar dinero, a veces puedes congelar el pan que te sobra para disfrutarlo más tarde. Y eso es muy práctico, ya que no siempre se tiene tiempo de ir a buscar el pan a la panadería.
Puedes congelar el pan fácilmente, siempre que lo metas en una bolsa especial que cierre herméticamente. Luego tienes que consumirlo en un plazo de 3 meses, que es el tiempo máximo de conservación del pan en el congelador. Lo ideal es que escribas la fecha en la bolsa para que no se te olvide.
Si quieres comer pan mientras está congelado, es normal que pienses en utilizar el microondas para descongelarlo más rápidamente. Este tipo de aparato es ideal para descongelar alimentos, pero cuando se trata de productos elaborados con harina, como pan, pizzas, galletas y pasteles, el proceso no es el mismo.
Si metes en él un producto con levadura como el pan, el resultado no te va a gustar. El calor no se distribuye uniformemente y dañará la masa. Como resultado, es probable que acabes con un pan de sabor extraño.
Es necesario descongelar productos como el pan correctamente y lo antes posible. Más concretamente, cuando descongele pan, sáquelo del congelador y póngalo a temperatura ambiente durante varias horas. Después, puedes recalentar el pan en el horno para obtener un alimento crujiente como si acabaras de comprárselo a tu panadero.