¿Se pudren tus orquídeas? No las tires todavía, porque puedes devolverles la vida rápidamente con este único ingrediente. Es una solución sencilla pero muy eficaz.
Las orquídeas son plantas de una belleza incomparable y una elegancia sin igual. Muchas personas las eligen para embellecer sus hogares u oficinas.
Sin embargo, estas plantas no sólo son hermosas, sino también muy delicadas. Por eso necesitan cuidados especiales para mantenerse sanas. Y si las cuidas adecuadamente, tus orquídeas producirán flores magníficas. Sin embargo, esto no siempre ocurre.
Aunque la planta crezca bien, no florecerá. A veces, las hojas amarillean y la planta se pudre. ¿Es posible salvar la planta en este caso?
Sí, aún hay forma de salvar la orquídea podrida y, además, la solución está al alcance de todos. Se trata de un tratamiento natural, económico y absolutamente eficaz. Le explicamos las distintas etapas del procedimiento.
Orquídeas podridas: ¡revívelas con este único ingrediente!
Cuando las orquídeas empiezan a marchitarse, con hojas completamente amarillas y tallos y raíces parcialmente secos, son los signos evidentes de la podredumbre. Llegados a este punto, mucha gente tira sus plantas a la basura. Pero cometen un gran error, porque aún pueden recuperarla con esta solución milagrosa. Le devolverá la vida rápidamente.
Para ello, te aconsejamos que elimines las partes muertas de la planta retirando con unas tijeras las hojas amarillas, los tallos secos y las raíces podridas. Una vez que la planta esté bien limpia, utiliza el ingrediente secreto que salvará a tu orquídea: la canela.
Espolvorea una cucharadita de canela sobre el sistema radicular de tu planta y deja que se seque suavemente. Cuando la especia se haya absorbido por completo, saque con cuidado la planta con todas sus raíces de la maceta. A continuación, retira también la mezcla de la maceta.
A continuación, pasa la planta por agua corriente para eliminar el exceso de tierra. A continuación, corta las raíces secas.
Ahora, toma 2 litros de agua caliente y vierte una cucharadita de canela. Cuando el polvo se haya disuelto, sumerge el sistema radicular de la planta en esta solución.
Al cabo de un rato, vuelve a poner la planta en su maceta original con tierra nueva apta para orquídeas. En un abrir y cerrar de ojos, verás cómo tu planta revive con hojas nuevas y raíces más fuertes y sanas.