Orquídeas: ¿es posible cultivarlas en agua sin raíces?

¿Tienes una orquídea sin raíces y estás pensando en tirarla así como así? No cometas este gran error, porque todo lo que tienes que hacer es seguir este método para cultivarla en agua. Podrás revivirla y tenerla floreciendo de nuevo en muy poco tiempo.

La orquídea es una planta que no necesita muchos cuidados. Por eso decora y embellece muchos hogares como planta de interior.

Sin embargo, es necesario seguir ciertos consejos de expertos jardineros para evitar que la planta se muera. Son esenciales si quiere obtener una orquídea sana que produzca flores generosamente.

¿Qué debe hacer para salvar una orquídea sin raíces?

Si descubre que las raíces de su orquídea están podridas, lo primero que debe hacer es sacar la orquídea de su maceta y cortar las raíces secas y podridas con unas tijeras desinfectadas. No dudes en cortarlas todas, de lo contrario pudrirán toda la planta. Y no te preocupes, incluso sin raíces, tu orquídea volverá a la vida en poco tiempo si adoptas este gran consejo de jardinero.

Después de quitar las raíces, retira también las ramas secas. A continuación, espolvorea canela o cúrcuma sobre las zonas podadas para evitar la formación de moho.

Aunque mucha gente está acostumbrada a poner las raíces en agua, esta vez son las hojas las que se sumergirán en agua para ayudar a crecer a tu orquídea. Para ello, coge un vaso transparente que deje pasar la luz e introduce tu planta dentro, colocando las hojas en 5 centímetros de agua. Utiliza un palillo para evitar que las raíces caigan al agua.

Al cabo de 15 días, podrás ver cómo se forman pequeñas protuberancias. Esto significa que la técnica ha funcionado bien. Después, al cabo de 4 meses, aparecerán raíces de unos centímetros. Durante este tiempo, no olvides añadir agua cuando no quede nada en el vaso.

Cuando las raíces midan varios centímetros, ya puede plantar su orquídea en una maceta. Para estimular el enraizamiento, hazte con bolas de arcilla, corteza de pino y musgo.

¿Cómo hacerlo? Coge un vaso de plástico y haz incisiones en la base. Añade las bolas de arcilla en el fondo, seguidas de la corteza de pino y el musgo. Riega el musgo antes de plantar la orquídea. Pon un poco de corteza de pino encima y ya está. Ahora sólo tienes que cuidar de tu orquídea para que se desarrolle perfectamente.