La orquídea es una planta que parece frágil y delicada, pero en realidad es una planta fuerte que puede florecer incluso en manos de principiantes. ¿Cuáles son los secretos para tener orquídeas sanas que florezcan en las mejores condiciones posibles?
¿Cómo se cuidan las orquídeas?
Riéguelas
Cuando las raíces se vuelven blancas, tus plantas necesitan riego. Para ello, llene un recipiente con agua y sumerja la maceta durante un minuto. En menos de un minuto, las raíces reverdecerán gracias a una buena hidratación.
¿Y ahora qué? Riega en función del color de las raíces.
No: ¡evite regar en exceso! No riegue sólo cuando las raíces tengan un color blanco grisáceo.
Aliméntalas
Puede pulverizar abono líquido sobre las raíces de las orquídeas. También puede sumergir el cepellón en agua mezclada con este abono líquido. Esto debe hacerse dos veces por semana.
¿Qué puedo hacer yo? Para alimentar las plantas, utilice abono para orquídeas. Existen dos tipos de abono, uno para el crecimiento de las hojas y otro para la floración.
No: evite añadir abono después del periodo de floración. La planta está en reposo y no necesita abono.
Cortar las raíces
En un momento dado, algunas raíces de tus plantas pueden secarse. Es un fenómeno normal que les ocurre a todas las plantas. Lo mejor es cortarlas, así como las que estén blandas por la humedad.
¿Qué hay que hacer? Corta las raíces secas y blandas con tijeras de podar o a mano.
No lo hagas: evita tocar las raíces sanas, carnosas y de color verde brillante. Estas raíces están vivas.
Eliminar las flores marchitas
Las flores empiezan a marchitarse en la base del tallo floral. Antiestéticas, hay que retirarlas porque pueden convertirse en nidos de plagas.
¿Qué hay que hacer? Retire las flores marchitas, las hojas secas y los tallos dañados.
Si observa una plaga de insectos, trátela en cuanto aparezca.
Elimine las hojas amarillas
Con el tiempo, las hojas más viejas pueden volverse amarillas. Se trata de una parte normal del ciclo de la planta, pero también puede ser un signo de exceso de agua. Debes retirarlas para evitar que las plantas se pudran.
¿Qué hay que hacer? Retire las hojas amarillas con la mano, arrancándolas desde la base.
No quites las raíces que las rodean.
Limpiar las hojas
Limpie las hojas con regularidad para mantener la planta sana.
¿Qué debe hacer? Lavar las hojas a mano.
No: evite utilizar pulimentos para limpiar las plantas de interior.