Puede sonar extraño, pero es posible conseguir ropa perfectamente blanca sin dañar las fibras textiles utilizando aceite y mantequilla. Esta combinación es un excelente sustituto de la lejía, un detergente agresivo y perjudicial para el medio ambiente. He aquí cómo hacerlo.
Olvídate de la lejía, usa aceite y mantequilla en la ropa
Si tienes manchas negras en la ropa, puedes eliminarlas con aceite, mantequilla, jabón, detergente suave y unas gotas de gasolina. Aquí tienes los pasos a seguir:
- Vierte unas gotas de aceite o mantequilla sobre un paño seco;
- Frote la zona sucia con un algodón empapado en gasolina;
- Si la mancha está muy seca y rebelde, puedes frotarla y añadir un poco de jabón de Marsella;
- Dejar actuar y meter la ropa en la lavadora;
- Lavar como de costumbre.
¿Por qué evitar la lejía?
La lejía es una solución química a base de hipoclorito sódico. Se trata de un compuesto potente y muy tóxico que puede provocar quemaduras alcalinas. Además, esta sustancia favorece el amarilleamiento de la ropa, especialmente la blanca.
Esta solución no está exenta de riesgos para la salud humana, ya que provoca irritaciones en las mucosas y la piel. También es perjudicial para el medio ambiente. Todas buenas razones para renunciar al uso de lejía en favor de los remedios naturales.
