Seguro que alguna vez se ha preguntado por qué el chocolate se envuelve tan bien en papel de aluminio. Pues bien, existe una verdadera razón. Siga leyendo para saber más.
No tire el envoltorio de aluminio de las tabletas de chocolate: ¡es un gran error!
El papel de aluminio que envuelve las tabletas de chocolate tiene una función comercial. Les da un aspecto mucho más atractivo. Te sorprenderá saber que el chocolate no se conserva en el frigorífico. Sin embargo, esto no es motivo para poner el paquete junto a una fuente de calor.
Cuando la manteca de cacao entra en contacto con una temperatura elevada, se funde y crea una mancha. Por eso hay que utilizar papel de aluminio en lugar de cualquier otro tipo de envase.
Además de tener un impacto estético, el papel de aluminio preserva las cualidades del chocolate. El calor, la humedad y la luz pueden alterar la textura y el sabor del chocolate. Si se expone mucho al aire y a la luz, existe un alto riesgo de oxidación.
El aluminio es una protección hermética que crea una especie de barrera contra las agresiones externas.
¿Qué dicen las cifras sobre el consumo de chocolate?
Tanto a los niños como a los adultos les encanta el chocolate, ya sea como tentempié o como postre. En los supermercados, el chocolate está disponible en una amplia gama de sabores, del negro a la leche, así como variaciones con sal o especias.
Para los chocolateros artesanos, el chocolate es una forma de explorar múltiples sabores y combinarlos para crear un producto único. Sin embargo, la población francesa tiene predilección por el chocolate negro, con leche y blanco. Es justo concluir que la población francesa aprecia mucho este alimento.
Un estudio realizado por el sindicato del chocolate en 2021 demostró que cada hogar puede consumir hasta 13,2 kg de chocolate al año. A diferencia del resto de Europa, a los franceses les encanta comer chocolate negro.
Como puede ver, no es aconsejable tirar el papel de aluminio utilizado para envolver las tabletas de chocolate, ya que conserva su textura y sabor. Y admitámoslo, siempre es agradable desenvolver los trozos de chocolate en el famoso papel de aluminio.