

Si cometes alguno de estos errores antes de poner en marcha la lavadora, probablemente acabes pagando más de lo que deberías.
Poner en marcha la lavadora es una acción que realizamos casi a diario, muchas veces sin pensarlo. Pero antes de hacer esto, es importante prestar atención a algunos pequeños errores que pueden costarnos mucho más en la factura y desperdiciar energía. Averigüemos cuáles son.
¿CÓMO CUESTA UTILIZAR LA LAVADORA?
De media, el consumo de energía y agua de una carga de lavadora puede variar dependiendo de varios factores, entre ellos la capacidad de la lavadora, la eficiencia energética del modelo y el programa de lavado elegido. En general, el consumo medio de energía de un ciclo de lavado se sitúa entre 0,5 y 2,5 kWh, mientras que el consumo de agua ronda los 40-60 litros.
Teniendo en cuenta los costes de energía y agua, se estima que el coste medio de un ciclo de lavado ronda los 0,30-0,50 euros. Cabe señalar que estos valores son sólo una estimación aproximada y pueden variar significativamente dependiendo de los factores anteriores, así como de las tarifas específicas de energía y agua de la ubicación.

Para reducir el consumo en la factura, se recomienda utilizar programas de lavado a bajas temperaturas, llenar la lavadora al máximo de su capacidad y plantearse adquirir modelos con mayores índices de eficiencia energética. Pero ahora veamos en detalle qué errores se deben evitar al utilizar la lavadora para ahorrar en la factura.
Poner en marcha la lavadora con demasiado detergente
El primer error que se debe evitar al lavar es utilizar demasiado detergente. Un exceso de detergente genera una cantidad excesiva de espuma, que atrapa bacterias y suciedad e interfiere con el enjuague completo de algunas zonas como los cuellos.
Además, la espuma también podría quedarse en el cestillo al finalizar el lavado, obligándonos a repetir el ciclo para eliminarla por completo. Esto conduce a un mayor consumo de energía y mayores costes.
Utilice cualquier detergente y no separe la ropa.
El segundo error es utilizar cualquier detergente. Es fundamental elegir el detergente adecuado para lograr resultados de lavado óptimos. Se recomienda utilizar cápsulas en lugar de detergentes líquidos ya que se esparcen menos y requieren una regulación independiente de la cantidad a utilizar.

También es importante separar correctamente las prendas claras de las oscuras. Separar la ropa en blancos, oscuros y claros antes del lavado es importante para evitar el riesgo de arruinar las prendas blancas y tener que blanquearlas posteriormente, generando costes adicionales.
Lo mismo se aplica a la conservación de los materiales en el tiempo. Las prendas más pesadas como suéteres y jeans deben lavarse por separado de las prendas delicadas para conservarlas y lograr mejores resultados, permitiéndonos ahorrar.
Poner en marcha la lavadora con una carga incorrecta
Otro error a evitar es poner en marcha la lavadora con demasiada o muy poca ropa. Es importante llenar la lavadora adecuadamente para evitar desperdiciar productos, agua y energía lavando sólo unas pocas prendas.
Al mismo tiempo, no se debe sobrecargar la lavadora, ya que la sobrecarga puede reducir la eficacia del lavado al impedir que el detergente actúe en todas las superficies de la ropa. Y al final, podemos encontrarnos con que después del lavado, la ropa sigue manchada y hay que volver a lavarla, lo que supone un importante desperdicio de agua y energía.

En resumen, es fundamental evitar estos errores antes de poner en marcha la lavadora para evitar derroches de energía y costes adicionales. Usar la cantidad adecuada de detergente, elegir el detergente adecuado, clasificar la ropa correctamente y cargar la lavadora de forma adecuada son pasos importantes para lograr un lavado eficaz y eficiente.
De esta forma reducimos el impacto ambiental y ahorramos significativamente en la factura.
