Mete 4 plátanos al horno, es el truco de millones de amas de casa: siempre lo harás
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En los últimos tiempos las soluciones DIY se han puesto muy de moda. Cada día nos enfrentamos a problemas domésticos cotidianos que se pueden solucionar con bastante facilidad. Por ejemplo, ¿sabes por qué poner 4 plátanos en el horno es una brillante idea? No lo creerás, pero es un truco que todas las amas de casa utilizan ahora: descubramos más.
El plátano es una fruta que aparece en la mayoría de dietas, pero que no es en absoluto adecuada cuando se sigue una dieta hipocalórica. Es una fruta que contiene una gran cantidad de azúcares. Pero no sólo eso, es rico en potasio y vitaminas, fantástico para el cuerpo humano y los intestinos. Tienen pocas calorías, de hecho sólo hay 65 calorías por cada 100 gramos ¿Pero sabes cómo utilizarlas? Basta con meter 4 de ellos al horno y listo.
TODOS LOS BENEFICIOS DEL PLÁTANO: LAS PROPIEDADES
El plátano es una fuente de fibra que aporta un gran alivio al cuerpo humano. Ayuda a mantener un vientre plano reduciendo la hinchazón, por lo que es un excelente aliado para personas con problemas intestinales. Es rico en vitaminas C y A y es uno de los antioxidantes naturales más eficaces.
Sus propiedades son realmente asombrosas, por supuesto no podemos pasar por alto el potasio, que juega un papel muy importante en esta fruta. Favorece la eliminación de toxinas y nutre la piel y el cabello. Previene la anemia porque favorece la formación de hemoglobina ya que contiene una buena dosis de hierro.
Pero es importante consumirlos siempre con precaución. Contiene mucha azúcar, por lo que no se recomienda para personas con obesidad o diabetes. Así que antes de incorporarlos a tu dieta consulta con un profesional o con tu médico de cabecera.
¿Sabías que si metes 4 plátanos al horno el resultado te dejará sin palabras? Es una idea brillante que están poniendo en práctica muchas amas de casa: descubramos para qué sirve.
Plátanos al horno: el truco infalible
Hay dos tipos de personas: las que aman los plátanos maduros y las que los prefieren verdes. La diferencia entre estos dos tipos es enorme. Según la consistencia y el sabor, los primeros son suaves y dulces, mientras que los menos maduros son más duros y amargos.
Los plátanos verdes contienen muchos almidones, pero con el tiempo maduran y se vuelven amarillos. En los plátanos amarillos, los almidones se convierten en azúcares, por lo que la fruta se vuelve amarilla y adquiere un sabor muy dulce. A la mayoría de la gente le encanta esta textura y sabor.
Pero si en casa sólo tienes plátanos verdes, ¿cómo puedes hacer que maduren lo más rápido posible? Lo único que tienes que hacer es meterlas en el horno unos minutos. Una vez que la piel esté negra solo te queda pelarla y disfrutar. Es un método sencillo y eficaz que utilizan muchas amas de casa.