Hablar de “pasta” es un poco como hablar de “Italia”: desde la Edad Media, la preparación a base de sémola o harina se ha definido cada vez más tanto en su forma como en su elaboración. No es difícil prepararse si sigues ciertas reglas. Para no fracasar en esta tarea , es importante conocer los errores más comunes , ya sea en Italia o en otros países.
Los 10 errores más comunes al cocinar pasta
imagen: bloques de historias
- No prestes atención a la calidad. Sabemos que el presupuesto no es igual para todos. Sin embargo, a veces hay una razón por la cual algunos productos son más caros que otros. La pasta hecha de bronce es definitivamente mejor que la pasta hecha de teflón. El proceso de fabricación es más lento y esto afecta la densidad del producto.
- No te fijes en la forma: Si ya sabes qué salsa quieres hacer con la pasta, debes pensar qué tipo de pasta va mejor con ella. En general, los fideos largos son especialmente adecuados para salsas líquidas, las versiones más cortas para las más espesas.
- No utilizar la cantidad adecuada de agua: Sólo hay que hacer un pequeño cálculo. Un litro de agua es suficiente para preparar 100g de pasta. Si usas muy poca agua, puede suceder que el exterior del fideo ya esté blando y el centro aún no esté cocido. También se libera almidón.
- Echar agua fría sobre la pasta después de cocinarla: Si quieres preparar un plato con pasta fría, sabes que tienes dos opciones: echar agua fría sobre la pasta o ponerla en un colador, añadir un poco de aceite y dejar reposar. propio dejar enfriar. Esta es la mejor opción. Si les viertes agua fría, el almidón se disolverá, lo cual es muy importante para el sabor de la pasta.
- No prestes atención al tiempo de cocción: la confianza es buena, el control es mejor. Especialmente si pruebas un nuevo tipo de pasta. No debes exceder el tiempo de cocción recomendado en el empaque y retirar la pasta 2 minutos antes para que no quede muy blanda al mezclarla con la salsa.
- ¿Cuándo le agregas sal al agua? Se habla de ello en todas las familias italianas. Vamos a lo seguro y te mostramos dos opciones: Añadir la sal al agua desde el principio (antes de hervir) aumenta la temperatura cuando hierve y garantiza una buena preparación. Si agregas primero la sal al agua hirviendo, ahorrarás energía porque el agua hierve más rápido. Pero es sólo un ahorro mínimo. Lo único que se debe evitar es poner pasta y sal en el agua al mismo tiempo. Ambos juntos bajan la temperatura y la sal hace que el agua tarde más en volver a hervir. En cuanto a cantidad, debes añadir entre 7 y 10 gramos de sal por cada litro de agua.
- Nunca tapes la olla cuando la pasta ya está en el agua. Probablemente todo el mundo lo sepa, pero queríamos mencionarlo de todos modos.
- Agregue una gota de aceite a la pasta terminada: probablemente mucha gente haga eso. Sin embargo, sabemos que los dos elementos no pueden combinarse a nivel molecular. Para evitar que la pasta se pegue, conviene tirarla de vez en cuando después de cocinarla.
- Usar la olla equivocada. Un ejemplo: existen cacerolas especiales, altas y estrechas, para cocinar espaguetis.
- Vierta el agua de la pasta al escurrirla. El agua de pasta es rica en minerales y se puede utilizar para muchas cosas. Ya sea para regar plantas, hacer un tratamiento para el cabello o cocinar al vapor otros alimentos.
Si te atienes a estas cosas, ¡es difícil fallar al hacer pasta!