
Hoy te explicamos por qué siempre debes llenar una botella de vino con arroz. Es un truco increíble.
Te revelamos un método increíble, desconocido para muchos, que te ayudará a aprovechar al máximo las propiedades que contiene el arroz. Lo único que tienes que hacer es meterlo en una botella y esperar. Es así de simple.
LAS PROPIEDADES DEL ARROZ
Una copa de vino tinto, blanco, gris o rosado realza el sabor de un plato. Una vez vacía la botella, algunos la tiran inmediatamente a la basura, mientras que otros se divierten poniendo en ella un puñado de arroz. Y tienen razón, porque este truco natural es ingenioso y eficaz.
A primera vista, la idea de poner arroz en botellas de vino vacías parece una idea de reciclaje que tiene una connotación decorativa. Pero eso está lejos de serlo. De hecho, ¡te sorprenderá saber el papel de los cereales!
En primer lugar debes saber que el arroz, especialmente su almidón que libera al dejarlo reposar, tiene un pH 6 y unas propiedades limpiadoras y desengrasantes increíbles. Algunos creen que son equivalentes a los que resultan de combinar vinagre y bicarbonato de sodio.
Muchos utilizan el poder del almidón de arroz para eliminar una variedad de manchas que normalmente son difíciles de eliminar, como las manchas de óxido y cal. Quizás ya lo sabías, pero los expertos en algunas partes del mundo utilizan regularmente el arroz para eliminar las manchas, algo para lo que no estaba destinado originalmente.
A continuación te explicamos paso a paso cómo hacerlo y, sobre todo, qué ventajas tiene.
¿Por qué ponerlo en una botella de vino?
Parece improbable poner arroz en una botella de vino. Pero ¿cuál es el motivo de este método? Limpia tu botella en profundidad y no deja rastros. Es una solución perfecta si, por ejemplo, quieres conservar un recipiente vintage para guardar otras bebidas o líquidos.
Eso sí habría que lavarlo bien para que no queden restos del producto original. A veces puede resultar complicado reutilizar las botellas de vino vacías, ya que pueden quedar incrustados olores y restos de vino.
Además, debido al cuello de la botella, no es muy fácil de limpiar con una simple esponja. Pero hay una solución más práctica y sólo necesitas arroz.
Para utilizar este truco, nada podría ser más sencillo. Después de vaciar completamente y enjuagar la botella, añade un puñado de arroz al recipiente.
Con un embudo, llene una cuarta parte de la botella y agregue ½ taza de agua hirviendo y unas gotas de jabón para platos. Luego ciérrelo con la tapa y agite vigorosamente.
El propósito de los granos de arroz es moverse para limpiar la suciedad y las manchas rebeldes que se adhieren a los lados. Continúe agitando la botella durante unos minutos antes de vaciarla y enjuagar con agua limpia.
