Cada uno de nosotros tiene su propio método para realizar las tareas del hogar. Pero la limpieza no es sólo una serie de trucos y opiniones. Es una auténtica ciencia, con reglas y principios bien definidos que garantizan resultados óptimos en términos de higiene, seguridad y respeto al medio ambiente. La limpieza del suelo, en particular, debe realizarse de forma correcta para evitar daños a la salud. Hoy vamos a desmentir tres mitos comunes y obsoletos sobre la limpieza de pisos.
3 conceptos erróneos sobre la limpieza de pisos
El primer mito que debemos desmentir es una creencia común a la mayoría de las personas. Mucha gente está convencida de que un detergente es mejor o peor que otro en función de la espuma que produce. En realidad, la espuma suele ser sólo un efecto estético y no determina en absoluto la eficacia del detergente. A la hora de elegir un detergente, prefiera el concentrado diluido en agua lo que garantiza una limpieza más eficaz.
Generalmente cuando nos disponemos a fregar, llenamos el balde con agua caliente pensando que limpia mejor que el agua fría. He aquí el segundo mito falso que queremos desacreditar. De hecho, el agua caliente no sólo podría dañar superficies especialmente delicadas, sino que incluso podría fijar la suciedad en el suelo en lugar de eliminarla. Además, pensar que hervir el agua mata más gérmenes es otro error. Para una limpieza óptima, utilice agua tibia o fría y detergentes desinfectantes.
Finalmente, cada día barremos el suelo pensando que hemos completado nuestra limpieza diaria de los suelos. En realidad, la escoba sólo elimina el polvo, el pelo y la suciedad superficial , pero no es eficaz para eliminar el polvo y los residuos más finos. En la limpieza diaria del suelo, para obtener buenos resultados se debe utilizar una aspiradora .
Ahora que ya sabes un poco más sobre la limpieza de pisos, evita utilizar métodos anticuados y sin respaldo si quieres verlos brillar y estar satisfecho con tu trabajo.